Montevideo, 8 de diciembre. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, dijo este martes que la posición de México sobre Honduras es preocupante tras las recientes elecciones en esa nación, donde el mandatario constitucional Manuel Zelaya fue expulsado del poder el pasado 28 de junio. La canciller mexicana, Patricia Espinosa, señaló que los comicios en el país centroamericano son una condición necesaria pero no suficiente para la normalización de la vida democrática.

Durante la sesión plenaria de la cumbre de presidentes del Mercado Común del Sur (Mercosur), celebrada en Montevideo, Chávez salió al cruce de la posición mexicana expresada por la canciller Espinosa, quien coincidió con la posición de Estados Unidos en el sentido de que los cuestionados comicios constituyen un paso hacia el retorno a la democracia.

La jefa de la diplomacia mexicana, quien acudió a la reunión en representación del presidente Felipe Calderón, dijo que México seguirá participando activamente en los esfuerzos encaminados a solucionar a la brevedad la crisis política y agregó que en Honduras se requiere todavía de otras medidas, como la creación de un gobierno de unidad nacional y de una comisión de la verdad.

Espinosa enumeró los puntos anteriores incluidos en los compromisos del Acuerdo de Tegucigalpa-San José, que fueron mencionados por Arturo Valenzuela, secretario estadunidense de Estado adjunto para los asuntos de América Latina.

De visita en México, Valenzuela dijo que cuando se satisfagan las condiciones la Organización de Estados Americanos (OEA) podrá considerar la vuelta del país centroamericano a su seno. Pero insistió en que la elección no fue inventada por el régimen hondureño de facto para blanquear el golpe, por lo que Washington no considera ilegítimos tales comicios.

Cuidado. Empiezan a buscar salidas honrosas. No podemos aceptar nada sino que Zelaya vuelva al gobierno y que haya de nuevo elecciones, dijo Chávez en respuesta a México, al tiempo que exigía al bloque regional adoptar una posición digna.

Chávez advirtió que “el dictador –Roberto Micheletti– saldrá por la puerta grande”, y señaló que pobre de aquellos gobiernos que empiecen a darle vuelta a esto para maquillar la brutalidad más grande que ha ocurrido en Honduras.

Tras subrayar que en la región hay países que reconocen al gobierno de Honduras, en alusión a Perú y Colombia, apuntó que allá hay un pueblo en resistencia, y reafirmó que se trató de elecciones totalmente amañadas.

Condenan el golpe de Estado

Los mandatarios de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Venezuela, integrantes del Mercosur, emitieron este día una declaración en la que expresaron el total y pleno desconocimiento de las elecciones del pasado 29 de noviembre en el país centroamericano, en las que fue declarado ganador Porfirio Pepe Lobo.

La declaración especial del Mercosur, según la calificó el presidente uruguayo anfitrión Tabaré Vázquez, señala que las elecciones fueron promovidas por un gobierno “de facto” y fueron desarrolladas en ambiente de inconstitucionalidad, ilegitimidad e ilegalidad, lo que constituyó un duro golpe a los valores democráticos de América Latina y el Caribe.

Los presidentes reiteran su más enérgica condena al golpe de Estado en Honduras y consideran inaceptables las graves violaciones de los derechos humanos y libertades fundamentales del pueblo, agrega la declaración.

La presidenta argentina, Cristina Fernández, reveló que seguramente los países del Mercosur van a adoptar medidas de tipo económico contra Honduras. Estimó que quien debería tomar las medidas sería la OEA por considerar el organismo pertinente en términos de derecho internacional.

El presidente paraguayo Fernando Lugo y el vicecanciller ecuatoriano Lautaro Poso también expresaron su rechazo a los comicios en Honduras. Lugo dijo que la crisis en ese país es un mal y peligrosísimo precedente y que ahora pretenden presentar un golpe de Estado como vía apta para organizar procesos electorales.

Mientras, los presidentes de Costa Rica, Óscar Arias, y de Panamá, Ricardo Martinelli, expresaron en San José su apoyo al presidente electo hondureño Porfirio Lobo. En una reunión que sostuvieron los tres en la capital costarricense, Arias y Martinelli advirtieron que Lobo debe lograr la renuncia del gobernante de facto Roberto Micheletti si quiere conseguir reconocimiento internacional.

(Con información de agencias y Georgina Saldierna)