El director del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Francisco Bojórquez Hernández, informó que 93 por ciento de los usuarios del Metro dijeron estar dispuestos a pagar tres pesos por el servicio a partir del 1^O de enero, 50 por ciento más respecto de su costo actual, a cambio de que se reduzca la demora en el paso de los trenes, mejore la seguridad y limpieza de las instalaciones y se retire a los vagoneros.

Al término de la firma de un convenio entre la Secretaría de Medio Ambiente y la empresa consultora BITSA, para lograr que la línea 12 del Metro obtenga recursos por la venta de bonos de carbono en el mercado internacional, explicó que en esta sexta encuesta aleatoria, aplicada a 5 mil 200 pasajeros el 2 y el 3 de diciembre pasado, hubo un incremento entre quienes están en favor de esa propuesta de incremento.

A pesar de la situación económica, hay una conciencia clara entre la gente de que es muy barato y se requiere de su apoyo para ser eficientes y mejorar la calidad del servicio, de acuerdo con las respuestas de empleados públicos y privados, que representaron 30 por ciento del universo; estudiantes, 24 por ciento, y obreros y profesionistas, 23 por ciento, quienes realizan por lo menos dos viajes diarios, destacó el funcionario.

Los mil 400 millones de pesos que se obtendrán con este aumento, de aprobarse la iniciativa, después de ocho años de mantenerse inamovible, mejoraría la frecuencia de trenes, la seguridad, la limpieza, el mantenimiento y el retiro de ambulantes. Sobre este punto dijo que hasta ahora sólo se han formado dos cooperativas y se atiende la demanda de grupos de invidentes y discapacitados para ubicarlos en los locales comerciales, donde pagarán una renta mensual de mil 400 pesos mensuales.

Así que los demás tendrán que salir, pues el próximo año no habrá más vagoneros en las instalaciones. Tuvieron la oportunidad de formalizarse y no les interesó. Y quien se arriesgue a vender sus productos se enfrentará a la nueva policía, afirmó.

Pidió un voto de confianza a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) para que se acepte este aumento y no se cancelen proyectos como la rehabilitación de línea A, la compra de trenes para la B, y el arrendamiento de trenes para la línea 12.

El vocero de la fracción del PRD en la ALDF, Alejandro Sánchez Camacho, señaló que independientemente de que ya las autoridades hicieron una consulta, es necesario orientar a la gente para tener legitimidad en caso de que se dé este incremento, por lo que vía telefónica o directamente con los usuarios se podría realizar este fin de semana otra consulta ciudadana para conocer su opinión.

No vaya a ser que al rato los paladines de la defensa de la economía de la gente pobre, todo esto entre comillas, vengan y se pronuncien en contra del aumento, cuando son ellos los que con su política de dos caras incrementan los impuestos, ironizó el perredista. Precisó que tenemos libertad de emitir nuestro voto en lo general y en lo particular en favor o en contra de una sugerencia del gobierno capitalino, pero para ello necesitamos la orientación de los usuarios.

Mencionó que las propias autoridades capitalinas han sugerido que la nueva consulta la haga la coordinación del Metro, pero aún, agregó, se está afinando el mecanismo.