Académicos e investigadores del Instituto Politécnico Nacional (IPN) manifestaron su beneplácito por el nombramiento de Yoloxóchitl Bustamante Díez como directora general de esa casa de estudios, aunque subrayaron que entre los retos más importantes de su gestión estará impulsar una mayor apertura hacia la comunidad politécnica en la toma de decisiones, así como fortalecer el sistema académico y científico de la institución.

Entrevistados por separado, ex directores generales de esa casa de estudio consideraron que la designación de una mujer al frente del Politécnico es un acierto, no sólo porque se avanza de manera decidida en la construcción de una cultura de equidad de género, también porque se trata de una persona con amplia trayectoria en el instituto, conocida por la comunidad y con logros académicos, lo que es muy importante para generar un liderazgo, afirmó Eugenio Méndez Docurro, director general de la institución de 1959 a 1962.

En tanto, integrantes de la Organización Nacional Politécnica (ONP) demandaron que la nueva administración impulse un verdadero proyecto de reforma al marco jurídico de la institución, a través de su ley orgánica, para que se cumpla la promesa de consultar a la comunidad en la toma de decisiones fundamentales para el IPN.

Mauro Enciso Barrón, catedrático de la Escuela Superior de Ingeniería Mecánica y Eléctrica (ESIME) e integrante de la ONP, afirmó que un sector de la comunidad académica percibe que este nombramiento es una vuelta de tuerca en el acercamiento del Politécnico con el Partido Acción Nacional, no sólo por su cercanía con el ex secretario de Educación Pública, Reyes Tamez Guerra, sino porque formó parte de una administración panista que apostó por el nulo fortalecimiento de la ciencia y la tecnología.

Por su parte, Alberto Calva Chavarría, profesor de posgrado de la Unidad Profesional Interdisciplinaria en Ingeniería y Tecnologías Avanzadas y presidente del Consejo de Investigadores Politécnicos, afirmó que es urgente transformar la verticalidad que aún prevalece en la toma de decisiones de la institución e impulsar una verdadera revisión del modelo académico cuya aplicación, desde 2004, generó más problemas que soluciones.

Raúl Talán Ramírez, director general del IPN durante el periodo 1985-1988, reconoció la experiencia de Bustamante Díez tanto en la iniciativa privada como la academia, pues destacó que cada vez es más importante que quien encabece instituciones de formación tecnológica cuente con un conocimiento de su institución y también del sector productivo, por lo que sin duda es un acierto su designación.

Beneplácito de Inmujeres

Por su parte, el Instituto Nacional de las Mujeres celebró el nombramiento de Yoloxóchitl Bustamante Díez, quien se convierte en la primera mujer que dirige esa casa de estudios.

En un comunicado, esta institución dijo que está segura que la labor de Bustamante Díez será en beneficio de la comunidad politécnica y que en los últimos años han mantenido comunicación y trabajo constante con ella en perspectiva de género lo que se ha traducido en mejoras para esa comunidad universitaria.

Sin duda alguna la futura directora es una aliada del Inmujeres por su decidido impulso de la igualdad de oportunidades entre mujeres y hombres del IPN.