La aprobación de reformas antiaborto en 17 estados representa un enorme retroceso para los derechos de las mujeres y, por tanto, deberían ser desechadas, manifestaron feministas y sindicalistas. Criticaron la actuación de legisladores de PRI y PAN de congresos locales por basar sus determinaciones políticas en creencias morales y religiosas.

Por otra parte, el obispo auxiliar de la Arquidiócesis de México, Abelardo Alvarado Alcántara, expresó: en temas como sexualidad, familia, matrimonio, aborto, eutanasia y clonación, los legisladores católicos están obligados a meditar su postura de acuerdo con la fe, porque ésta no puede estar separada de la vida; la persona es unidad y debe haber unidad entre fe y vida.

Leonor Concha, de la red Género y Economía, señaló que la aprobación de esas normas es un retroceso absurdo. Advirtió sobre el riesgo de que la penalización del aborto pueda llevarse a todo el país, dado el número de entidades que la han avalado, y llamó a desplegar una lucha más clara, visible y articulada.

Marta Heredia Figueroa, vicepresidenta de equidad y género de la Unión Nacional de Trabajadores, expresó que las leyes producto de la embestida de PRI y PAN en los estados son un retroceso, y coincidió con Naciones Unidas en que se trata de violencia contra la mujer.

En puerta, acciones de resistencia civil pacífica

Por otra parte, Martha Lucía Mícher, directora del Instituto de las Mujeres del Distrito Federal (Inmujeres-DF), advirtió que si se aprueba la reforma constitucional para dar marcha atrás a la despenalización del aborto se efectuarán acciones de resistencia civil pacífica, como “tomar calles” y una huelga de hambre.

Vamos a hablar con todos los diputados, no crean que a la primera nos vamos a ir a la resistencia. Claro que no. No vamos a permitir, bajo ninguna circunstancia, que en la ciudad de México se modifique la Constitución, precisó Mícher.

Ante cientos de personas congregadas en los alrededores del quiosco de la Alameda, en la capital del país, con motivo de la Feria de Servicios en Favor de los Derechos de las Mujeres, la titular del Inmujeres-DF cuestionó la posición asumida por la lideresa nacional del PRI, Beatriz Paredes, quien se disfrazó de feminista 20 años y nos dijo que lo que hacía el PAN no era posible, que eran unos conservadores. Ahora permite que en 17 estados sus legisladores aprueben ese tipo de leyes.

En entrevista posterior, abundó: Beatriz Paredes engañó a las feministas. Iba y se metía en los actos. Es una mentirosa, es una antimujeres, las prefiere en la cárcel, muertas de hambre.