El Sindicato Mexicano de Electricistas (SME) se mantendrá en la pelea hasta que se restituya el orden constitucional, y cada golpe, cada humillación se la tenemos que cobrar a (Felipe Calderón) sacándolo de Los Pinos, aseguró el dirigente del gremio, Martín Esparza.

Al participar como orador en la asamblea nacional que por los tres años del gobierno legítimo encabezó ayer Andrés Manuel López Obrador, Esparza informó que dos electricistas viajaron este domingo por la mañana rumbo a Europa para presentar ante el Parlamento Europeo una denuncia contra el decreto presidencial que extinguió Luz y Fuerza del Centro (LFC), para que sus integrantes vean las corruptelas, la forma de represión que están haciendo (en México) contra todos los movimientos sociales.

Advirtió, en nombre de 35 mil electricistas amparados contra ese decreto, que mantendrán su lucha. “Vamos a estar dando la pelea, (aunque) preparan expediente negro para la dirigencia del SME”, y porque “no podemos esperar a que nos muramos de hambre, a que en el Congreso (de la Unión) digan que no hay condiciones políticas para una controversia constitucional.

¡No le debemos un peso al gobierno federal! ¡Aquí estamos de frente!, exclamó ante las miles de personas que se concentraron en el Zócalo capitalino y le expresaron total respaldo.

El SME no se vende, el SME tiene memoria histórica y estará con ustedes recibiendo la solidaridad, porque queremos un país con libertad, con justicia y con democracia, aseguró.

Esparza acusó que la embestida del gobierno federal contra el sindicato llegó al extremo de suspender la atención médica en el Instituto Mexicano del Seguro Social a sus compañeras embarazadas. Ayer una fue al Seguro Social y le negaron la atención; tuvo que ir a otra clínica. Llegó muy enferma y falleció su bebé. ¡Es lo que ha hecho Felipe Calderón! ¡Es lo que ha hecho el capital!, refirió, y resaltó que detrás del decreto presidencial están los negocios de las telecomunicaciones y la fibra óptica, “violando la Constitución y la Ley Federal del Trabajo.

Son los verdaderos intereses que han movido, y la corrupción de Alfredo Elías Ayub, director general de la Comisión Federal de Electricidad. Citó los grandes negocios del gas con Repsol, una empresa española, filial de Iberdrola, a lo cual responde el costo alto de las tarifas eléctricas, y los negocios con Pechinnt, una empresa italo-argentina que ya tiene inversión en México, contratos millonarios, inflando los costos y las licitaciones.

Cuando van 42 días de resistir el golpe de Estado de la Policía Federal y el Ejército contra el SME, los sindicatos, los contratos colectivos y el patrimonio energético de los trabajadores, Esparza recordó los ataques sufridos durante el paro cívico del 11 de noviembre. “Fuimos reprimidos, golpeados –incluidos esposas e hijos de trabajadores–; hubo 11 detenidos, entre ellos Manuel e Ismael, a quienes ya sacamos con la fuerza del SME, y más de 30 vehículos despedazados.”

Martín Esparza recordó la campaña que hace más de tres años, indicó, emprendió la oligarquía contra Andrés Manuel López Obrador por ser un candidato legítimo para transformar las condiciones del país. Dijeron que era un peligro para México, que si llegaba iba a haber una revolución, en ese lapso. Pero, ¿quién ha sido el peligro para México? Los que aseguraron que iban a bajar los impuestos, los subieron; los que señalaron que iban a generar empleos, están acabando con ellos; los que afirmaron que iban a utilizar bien nuestros impuestos, se los están robando; los que dijeron que iban a defender a Pemex y al sector eléctrico, lo están rematando, puntualizó.

“Ha salido la verdad: ¡el peligro para México es el que está en Los Pinos y se llama Felipe Calderón! Por eso saludamos con respeto el proyecto que encabeza nuestro ‘presidente legítimo’, Andrés Manuel López Obrador”, concluyó.