José Hernández, astronauta estadunidense de origen mexicano, recomendó al presidente Felipe Calderón que México siga el ejemplo de Brasil, tanto por sus niveles de inversión en ciencia y tecnología como por ser una potencia aeroespacial con la empresa Embraer, la tercera más importante del mundo.

Este ingeniero de la NASA, quien en septiembre viajó a bordo del transbordador Discovery a la Estación Espacial Internacional, en la misión STS-128, fue recibido en una ceremonia especial por Calderón, ante quien propuso que México apueste por la ciencia, dado que los recursos naturales se agotan y los recursos intelectuales perduran.

Deseo ver un México desarrollado, con industrias competitivas, empleos calificados y, sobre todo, aprovechando a nuestros talentos, expresó Hernández, quien describió a sus padres como una familia típica que emigró hace décadas al vecino país del norte, proveniente del rancho Ticuítaco, de La Piedad, Michoacán

El austronauta y su familia pasaron el día de ayer con Calderón en un hecho inusitado en las actividades presidenciales. Primero fueron a la residencia de Los Pinos y luego lo acompañaron a una gira por Michoacán, también tierra natal del mandatario.

Hernández explicó que si bien nació en Estados Unidos y es orgullosamente de ese país, también se asumió como mexicano porque lo dice el artículo 30 de la Constitución y fue criado como tal.

Con anécdotas de cómo se acercó desde niño a la ciencia, ilustró la importancia de invertir en ese rubro. La charla hizo sonreír a los asistentes, entre los que se encontraban el embajador de Estados Unidos en México, Carlos Pascual, así como estudiantes y los ganadores de un concurso de robótica.

Luego puso de muestra a Brasil, cuya empresa aeroespacial Embraer está sólo por debajo de la estadunidense Boeing y la europea Airbus, y ha logrado tener una economía en expansión.

Al respecto, Calderón aseguró que México impulsa de manera decidida la inversión científica y comercial en la industria aeroespacial, y mencionó que empresas como la canadiense Bombardier ya se han establecido en México. El objetivo, dijo, es que algún día pueda despegar desde territorio mexicano un avión o un helicóptero plena e integralmente construido en el país.

Reconoció que falta muchísimo más para que México alcance los niveles óptimos en ciencia y tecnología, y expresó su deseo de que el liderazgo del doctor Hernández se pueda transmitir a todos los tomadores de decisiones en la vida nacional, en el Ejecutivo y en el Legislativo, en los estados y en los municipios, para enfocar las prioridades hacia ese sector.

También dijo que el Congreso analiza la creación de la Agencia Aeroespacial, propuesta por el astronauta y por otros científicos, para lo cual se destinó un presupuesto de 122 millones de pesos que se invertirán en diversos proyectos.

Alonso Lujambio, secretario de Educación Pública, admitió que hay un problema en la generación de vocaciones científicas en el país, ya que apenas 2.5 por ciento de la matrícula de educación superior se concentra en esa área.

Como recuerdo de su viaje al espacio, Hernández obsequió a Calderón un cuadro con fotografías de la misión en la que participó y de una bandera mexicana como la que llevó consigo en aquella travesía, la cual se verificó del 28 de agosto al 11 de septiembre pasados.