El escándalo arrincona a la derecha; cesan a jefe policial
Miércoles 18 de noviembre de 2009, p. 23
Buenos Aires, 17 de noviembre. La presidenta argentina, Cristina Fernández de Kirchner y su esposo, el ex mandatario Néstor Kirchner (2003-2007), habrían sido espiados por la Policía Metropolitana dependiente del gobierno de la ciudad de Buenos Aires, al igual que otros políticos, según el juez Federal Norberto Oyarbide quien investiga este escandaloso caso que conmueve a la ciudad.
Quiero transmitir que todavía esta información no está completa, porque ha trascendido por algunos medios que también estaban los datos muy específicos y personalísimos de nuestra señora presidenta y de su esposo, Vamos a investigar a fondo
, dijo el magistrado.
La situación obligó al jefe de gobierno Mauricio Macri- quien realiza una gira por Europa-a pedir la renuncia de Osvaldo Chamorro, el nuevo titular de la Policía Metropolitana.
Este es el segundo jefe de la cuestionada policía del gobierno capitalino despedido antes de que esa institución entre en funciones en febrero próximo. El caso anterior fue el del comisario Jorge Fino Palacios, quien renunció por estar involucrado en ocultamiento de pruebas sobre el cruento atentado contra la mutual judía Amia, que dejó más de 80 muertos en julio de 1994 y por el espionaje contra Sergio Burstein, un familiar de las víctimas.
El ministro de Seguridad y Justicia del gobierno capitalino, Guillermo Montenegro- cuya renuncia piden diversas organizaciones- debió reconocer que Chamorro utilizaba el sistema Nosis
-algo similar a Veraz-, que si bien no es ilegal, en este contexto nos parece grave y no es ético
, ya que se usaba para el espionaje de políticos, empresarios, sindicalistas, legisladores opositores a la administración de Macri.
Macri, un empresario dirigente de Propuesta Republicana (PRO) de derecha, que tiene aspiraciones presidenciales apoyado por partidos y organizaciones derechistas internacionales, integra junto a varios ministros de su gabinete la Fundación Pensar, que con otras similares aquí, son sostenidas por la National Endowment Foundation (NED) y la Agencia internacional para el desarrollo (USAID) ligadas a la CIA estadunidense.
Recientemente lideró una reunión de estas organizaciones y personajes como el ex presidente español José María Aznar y la Fundación UnoAmérica, que apoya el golpe de Honduras y está involucrada en el intento de asesinato contra el mandatario boliviano, Evo Morales, como se descubrió en abril de este año.
Además del tema del espionaje, Macri ha sido denunciado por la destrucción de redes culturales y de contención a los sectores pobres, y en estos casos debió desactivar en estos días la Unidad de Control del Espacio Público (UCEP) un grupo al estilo de los escuadrones de la muerte que actuó violentamente contra indigentes y familias que vivían en las calles, y que fueron filmados por vecinos mostrando golpes y malos tratos contra las víctimas.
La justicia verificó una serie de investigaciones periodísticas en el caso de espionaje y el juez Oyarbide ratificó que en una de las computadoras secuestradas a Chamorro en un allanamiento sorpresivo, se encontraron datos sobre dirigentes de la oposición, funcionarios, legisladores y hasta sobre el jefe de Gabinete del propio gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta, quien procede del peronismo. Es en la lista de políticos importantes donde figurarían la presidenta y su esposo.
El magistrado ayer pidió el juicio político a jueces de Misiones, que en una extraña jugada habían ordenado escuchas
telefónicas en el marco de una supuesta investigación de asesinato, lo que posibilitaba una pantalla
jurídica para el espionaje ilegal.
Algunos de los informes de Chamorro, que tenía cercanas relaciones con el espía Ciro James, detenido por el espionaje contra el familiar de la Amia, y el seguimiento a maestros capitalinos y sus sindicatos, estaban referidos a cuestiones íntimas y al estado financiero de dirigentes opositores al gobierno capitalino.
La semana pasada fue allanada una oficina de la consultora Strategic Security Consultancy, de Fino Palacios, ubicada en pleno centro de la ciudad con la orden de ampliar esta acción a un estudio jurídico de Chamorro.
Pero en realidad al ingresar al primer lugar se descubrió que estos departamentos estaban conectados entre sí. Tanto Palacios como Chamorro habían sido separados de la Policía Federal en 2004, durante el gobierno de Néstor Kirchner.
Por su parte, el fiscal Alberto Nisman pidió hoy la detención de Palacios, por la causa en la que se investigan la escuchas ilegales en la Ciudad de Buenos Aires.