Pumas CU despertó en el tercer cuarto para remontar el marcador 39-17 a Águilas Blancas del IPN y enfilarse hacia su segundo campeonato, que buscará refrendar el próximo viernes, cuando enfrente a los Auténticos Tigres de la UANL, en la final de la Conferencia del Centro de la Organización Nacional Estudiantil de Futbol Americano (ONEFA).

Ante 40 mil aficionados en el estadio Olímpico Universitario, los anfitriones desplegaron toda su fuerza en la segunda mitad del partido para que el clásico estudiantil del deporte de las tacleadas se quedara en suelo felino. Entre los seguidores auriazules figuró el rector José Narro Robles, mientras los de guinda y blanco contaron con el apoyo del director general del Poli, Enrique Villa Rivera. Se vivió un verdadero duelo de porras, sin incitación a la violencia, algo que incluso se podía leer también en las mantas que cubrieron algunas partes del campo de juego.

Los dos primeros cuartos se inclinaron hacia el conjunto visitante, gracias a su defensiva y el mariscal de campo Rául Mateos, con el envío de dos pases de anotación que concretó Julio Reyes, más los extras de Erick Reséndiz, quien además aportó un gol de campo de 40 yardas.

Cerca de la zona prometida, Pumas sólo consiguió el touchdown de Jonathan Barrera, quien dio un pequeño salto y tocó el terreno rival; luego vino el extra del pateador Mauricio Morales y los cartones quedaron 17-10.

Pese a estar abajo del marcador, Pumas retornó al campo de juego dispuesto a darlo todo, al igual a como se entregó ayer su afición, que cantó el tradicional Goooooya, en sincronía ingeniosa y una que otra palabra altisonante hacia la tribuna adversaria, que respondía con Huuueeeeelum al anfitrión.

Con la puntería más afinada del mariscal de campo Francisco Alonso y las perfectas recepciones del estelar corredor local Barrera, así como de Érick Arzate para ingresar a las diagonales, los universitarios fueron avasalladores ante un equipo que empezó a cometer errores y ya no tuvo suficiente gas para responder el ataque ofensivo. En las postrimerías el encuentro, Águilas Blancas sufrió otro pase de 47 yardas de Alonso, recibido por Mauricio García para ingresar a las diagonales, además de la conversión de dos puntos para el 39-17 que dio a Pumas CU el boleto a la final por segundo año consecutivo en la era del head coach Raúl Rivera.

Al final del partido, los auriazules dieron la vuelta olímpica con Alonso, Barrera y el capitán Daniel Martínez, los más emocionados, porque junto con 12 elementos más concluyeron su elegibilidad, tras terminar sus estudios profesionales.

La víspera, Tigres eliminó 55-31 a los Aztecas de la UDLA.