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Aquí todo es una cadena, afirman habitantes que apoyan a electricistas en resistencia

Vecinos de Necaxa, en lucha para impedir la extinción del municipio Juan Galindo
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Trabajador de Luz y Fuerza ante la caseta de peaje de Necaxa-Huauchinango, Puebla, durante el inicio del paro cívico nacionalFoto Marco Peláez
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Periódico La Jornada
Jueves 12 de noviembre de 2009, p. 14

Necaxa, Pue., 11 de noviembre. En este día de resistencia y lucha, cientos de amas de casa, profesores, trabajadores petroleros y comerciantes de la sierra de Puebla se sumaron a la lucha de los electricistas, y durante más de 11 horas bloquearon la carretera Tulancingo-Poza Rica y los accesos a municipios como Juan Galindo, Huauchinango, La Ceiba y Villa Juárez.

La protesta causó un embotellamiento de más de 15 kilómetros dedes las ocho de la mañana a poco después de las 19 horas. Los conductores de camiones de carga, autobuses y vehículos particulares apagaron los motores de sus unidades y esperaron pacientemente a que se reabriera la circulación.

Los electricistas permitieron el paso de tres vehículos que transportaban enfermos de Villa Juárez a Huauchinango y de un cortejo fúnebre. La idea es que no tengamos nada que nos pese en la conciencia; estamos luchando por nuestros empleos y por ello protestamos, no para causar daño a nadie, aseguró Álvaro Amador, subsecretario de servicios médicos del SME de la división Necaxa.

Las movilizaciones en esa zona comenzaron a las seis de la mañana. Un grupo de más de 200 vehículos partió de la sede sindical con destino a la ciudad de México, y en su trayecto tomaron las casetas de Nuevo Necaxa y Tulancingo. El paso fue gratis.

En este último municipio se llevó a cabo un mitin de una hora, durante la cual entregaron propaganda de su movimiento y dieron información a los automovilistas.

Al filo de las ocho de la mañana las casetas de Nuevo Necaxa y Tulancingo fueron nuevamente tomadas por los electricistas. El puente Necaxa, que conduce al municipio Juan Galindo, fue bloqueado y unas mil personas se apostaron desde la carretera hasta la entrada al edificio administrativo de la hidroeléctrica Necaxa.

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Trabajadores y policías se enfrentaron en la autopista México-Querétaro, cerca de la caseta de cobro de TepotzotlánFoto Mario Antonio Núñez López

Luego, se colocaron automóviles y camionetas en los accesos a los otros municipios que conectan con la carretera Tulancingo-Poza Rica.

A las 12 horas, decenas de personas, la mayoría mujeres, realizaron una procesión del centro de Juan Galindo al puente Necaxa, en busca de lograr la gracia de Dios y que les conceda la devolución de su trabajo a los electricistas.

El contingente caminó por las principales calles de Juan Galindo con dos estandartes de la Virgen de Guadalupe al frente.

Poco después, más de cien comerciantes marcharon del mercado municipal al puente Necaxa y externaron su apoyo al movimiento electricista.

Durante un breve mitin, dos oradores demandaron el apoyo gubernamental para que se regrese a los trabajadores sus empleos, porque si no (el municipio de) Juan Galindo se va a morir, ya que aquí todo es una cadena.

Poco antes de las 19 horas todos los manifestantes comenzaron a retirar los vehículos que bloqueaban las carreteras. El reporte sindical fue saldo blanco.

Al filo de las 20 horas la circulación no se había normalizado, pero los trabajadores ya sólo mantenían plantones frente a los accesos a instalaciones de la hidroeléctrica, como lo han hecho desde hace una semana.