La Secretaría de Hacienda aceptó que el PRI proponga el aumento de la inversión en infraestructura de los estados y no en el gasto social, a cambio de que los diputados de ese partido voten en contra de que la Cámara presente una controversia constitucional contra el decreto de extinción de Luz y Fuerza del Centro.

Además, el subsecretario de Egresos de Hacienda, Dionisio Pérez Jácome, propuso el domingo pasado en una reunión con legisladores del tricolor aprobar la reforma a la Ley del Seguro Popular, para que las familias ya no paguen en bloque por el servicio, sino lo hagan de manera individual para que el gobierno federal gaste menos en su operación y el costo se traslade a los usuarios.

El gobierno de Felipe Calderón pretendía que la Cámara de Diputados aprobara un aumento de 50 por ciento de recursos al programa Oportunidades, que se financiaría con la aplicación de un impuesto de 2 por ciento al consumo. El viernes pasado, el PRI detectó que 7 mil 500 millones de pesos solicitados para gasto social no tenían destino definido, por lo que rechazó la petición del Ejecutivo.

Hasta el momento la discusión del proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) 2010 se ha postergado, porque el PRI y Hacienda no logran un acuerdo para destrabar la negociación, y han dejado fuera al resto de los grupos que integran la Cámara de Diputados.

El arreglo PRI-Hacienda permitió que la votación para determinar si la Cámara presentará un recurso contra el decreto que extingue Luz y Fuerza, se pospusiera hasta la sesión del próximo martes, con objeto de garantizar que los recursos para los estados estén seguros, y el PAN no los objete.

Diputados priístas refirieron que Pérez Jácome hizo la propuesta en nombre del titular de Hacienda, Agustín Carstens.

La Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados comenzó a trabajar el proyecto desde el domingo pasado alternando dos sedes: en el hotel Presidente Intercontinental de Polanco y sus oficinas en San Lázaro. De forma paralela, Hacienda se ha reunido con los priístas del grupo económico de la diputación federal, sin allanar un acuerdo definitivo que sea trasladado al pleno de la comisión.

Esa táctica del PRI fue definida por Pedro Vázquez González, coordinador del PT, como el secuestro de la negociación del paquete presupuestal.

“Somos testigos, nuevamente de la estrategia de la negociación en lo oscurito; la peor tradición de la política canalla que el gobierno federal ha implementado con su mejor aliado, el PRI. Por voluntad de ambos, el resto de las fuerzas parlamentarias hemos sido excluidas de la negociación del presupuesto. Con estas posturas que no nos extrañe que los tiempos que se avecinan serán profundamente ominosos para el pueblo mexicano.”

También el PRD exhortó al resto de las fuerzas políticas en la Cámara para que se reabran los canales de comunicación en torno a la discusión del PEF.

Los legisladores del PRD reprueban que la negociación se dé sólo entre los diputados de PRI y PAN con Hacienda, fuera de este recinto parlamentario. El PRD aclara que hasta ahora no hay ninguna mesa de negociación oficial. Sería lamentable que se repitiera el esquema de exclusión de nuestras propuestas, al igual que sucedió en la aprobación de la Ley de Ingresos, dijo en un comunicado.

Rechazó “cualquier negociación en lo oscurito, y al margen de la normatividad parlamentaria”.

Aun así, el gobierno federal continuó las negociaciones con el tricolor. En un intento por resolver el diferendo abierto por Hacienda, Francisco Rojas, coordinador de los priístas, se reunió con el subsecretario de Egresos, quien –de acuerdo con fuentes de ese partido– insistió en ceder a los gobernadores del PRI el manejo de recursos de infraestructura, a cambio de no respaldar al Sindicato Mexicano de Electricistas en la controversia constitucional.