Dentro de la tristeza que causó la eliminación o la no participación en la liguilla, tenemos optimismo y estamos pensando que nos va a ir bien en el Mundial de Clubes, comentó José Guadalupe Cruz, técnico del Atlante.

Los azulgranas estaban conscientes que clasificar en el torneo Apertura 2009 era muy complicado, confesó ayer El Profe.

“Habíamos dicho en días pasados que íbamos a luchar mientras matemáticamente hubiera posibilidades, pero nos alcanzó hasta aquí y también era un escenario que teníamos contemplado.

Obviamente era el que menos nos gustaba, pero tampoco podemos relajarnos y pensar que falta mucho para el Mundial y descansar. No, el equipo va a seguir trabajando normalmente, explicó, en entrevista vía telefónica.

Como el Mundial de Clubes es hasta diciembre y el Atlante culminará su participación en el torneo local este fin de semana, Cruz anunció que realizarán una especie de minitemporada, que nos dé una base fuerte en lo físico, y buscarán concretar tres partidos de preparación.

Puntualizó que no debe hacer mucho para levantar la moral de sus dirigidos. “Qué más motivación puede tener un jugador, un directivo, un técnico o una afición de un equipo como el Atlante que sabe que en diciembre va a estar representando al futbol del área y a nuestro país.

Es ir a jugar contra equipos muy cotizados, de los más importantes que hay a escala internacional. No es un torneo de invitación, es oficial, y los ojos del mundo estarán puestos en lo que hagamos o dejemos de hacer, así que el compromiso es muy importante, expresó el técnico azulgrana.

Cruz agregó que irán a encarar el torneo, como lo hicimos ahora que fuimos a la Copa de la Paz, en España, y tener un papel más que digno y decoroso.

A él no le importa si les dan pocas posibilidades de éxito. Recordó que ganaron “la liga en 2007 y conquistamos la Concachampions en 2009”. Además, “hemos logrado que jugadores que teníamos prácticamente desahuciados estén cotizados nuevamente, como es el caso de Luis Gabriel Rey, Gerardo Espinosa, Chícharo González. Es decir, los pronósticos y las expectativas están ahí para romperse; esa es la filosofía atlantista”.

Concluyó diciendo que tienen mucho que ganar y poco que perder, por lo que el equipo jugará muy relajado, muy ambicioso y con mucha personalidad.