Con música prehispánica y en el marco excepcional del Museo Nacional de Antropología, anoche fue presentada la nueva playera verde y blanca que vestirá la selección en el Mundial de Sudáfrica 2010.

El escenario fue esplendoroso. Hologramas con gigantescas playeras giraban sobre su eje mostrando cada detalle, en lo que debía ser una primicia, pero horas antes de la ceremonia circularon en Internet fotografías del uniforme.

En el patio central del recinto que guarda parte de la historia del país, se reunieron algunos de los jugadores que representarán a México en la fiesta mundial, a celebrarse a 14 mil 200 kilómetros de distancia de territorio nacional.

Cada integrante del Tricolor vestía el nuevo uniforme: playera verde y short blanco, mientras el de los porteros es de elegante color blanco, con vivos en rojo y negro en los hombros.

El director técnico Javier Aguirre encabezó al grupo. Su mensaje fue contundente, al llamar a los connacionales a apoyar a sus representantes en el futbol, que son, a su decir, guerreros de sangre caliente y huesos irrompibles, a quienes ha convocado a pelear como lo que somos, guerreros, y a ganar con todo... porque México es un país que tiene todo lo que necesita para triunfar.

Asistió el presidente de la Federación Internacional de Futbol Asociado, Joseph Blatter, quien deseó suerte a los mexicanos en Sudáfrica y dijo que mucho le gustaría ver a un campeón mundial que no sea europeo ni sudamericano, sino de Norteamérica.

Antes, una pléyade de mexicanos, triunfadores todos, desfilaron para recoger un diploma que les entregó la firma deportiva que confeccionó la playera.

Hubo espacio para todos, lo mismo estuvo Javier López, Chabelo, que el marchista Éder Sánchez, el flautisa Horacio Franco o el empresario Pablo González, sin faltar el monero Trino, pero quien se llevó la noche fue el arquitecto Pedro Ramírez Vázquez.

El portero Guillermo Ochoa consideró que es posible lograr el cetro mundial, pero para ello hay que estar convencidos, además de recalcar que las grandes conquistas comienzan con un sueño.