Domingo 8 de noviembre de 2009, p. 23
Washington. Investigadores del ejército estadunidense iniciaron la reconstrucción del tiroteo protagonizado el jueves por el siquiatra militar Nidal Malik Hasan para poder determinar cómo realizó un centenar de disparos con una sola pistola, en el incidente que dejó 13 muertos y más de 30 heridos en el cuartel Fort Hood, en Texas. Hasan es un mayor de infantería de 39 años, de origen palestino y religión musulmana, que iba a ser enviado a Afganistán, donde Washington tiene desplegados 68 mil soldados. Según testigos, actuó metódicamente y se dio tiempo para rematar a soldados a quienes sólo había herido en la primera refriega. Oficiales dijeron que cuando Hasan entró en el edificio donde ocurrió el ataque, portaba dos pistolas no reglamentarias de las fuerzas armadas. Pero cuando se paró en un escritorio y comenzó a gritar Dios es grande
, el mayor sólo llevaba un revólver belga semiautomático con un cartucho con capacidad extendida a 20 balas. Esto significa que tuvo la oportunidad de recargar al menos cinco veces, antes de ser sometido por dos policías. Hasan está hospitalizado, inconsciente, pero estable, después de recibir al menos cuatro disparos de los agentes que lo detuvieron. Osman Danquah, el líder de la comunidad islámica a la que pertenece Hasan, en Killeen, cerca de Fort Hood, reveló que durante el verano el militar le pidió orientación sobre su próxima misión en Asia, donde se vería obligado a disparar contra otros islamitas.