La juez federal Guillermina Coutiño determinó anoche negar una suspensión provisional a un trabajador en activo de Luz y Fuerza del Centro (LFC), quien pidió la medida de protección cautelar para que pudiera seguir cobrando su salario y que se reconociera la existencia de una relación laboral con el organismo, extinto el pasado 11 de octubre por decreto presidencial.

Explicó en su auto admisorio de una demanda de amparo que de ordenarse precautoriamente el reconocimiento de su relación de trabajo, así como el pago de sus salarios por parte del organismo descentralizado denominado LFC, se otorgarían a la suspensión provisional efectos restitutorios que no le corresponden, pues ellos son propios de la sentencia que se dicte en el juicio principal.

Entrevistado sobre este nuevo fallo, Carlos de Buen, uno de los abogados del Sindicato Mexicano de Electricistas, explicó que al negarle la suspensión a este quejoso, la juez precisó que la extinción de la paraestatal es un acto ya consumado (aunque está pendiente la revisión de su legalidad en el juicio de garantías).

Asimismo, la juez admitió anoche 39 amparos promovidos por trabajadores jubilados.

De su lado, el SAE y las secretarías de Energía y de Hacienda presentaron recursos de queja para impugnar ante un tribunal colegiado la suspensión provisional concedida al SME.