El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Armando Paredes Arroyo, refutó la acusación del presidente Felipe Calderón de que las grandes empresas sólo contribuyen con 1.7 por ciento de la recaudación fiscal, y consideró delicado que haga generalizaciones y juicios sin saber las condiciones de cada una.

No compartimos la opinión de que las grandes empresas no están contribuyendo. Las empresas sí pagan impuestos, afirmó en respuesta a las afirmaciones del jefe del Ejecutivo federal, aunque reconoció que algunas compañías no aportan gravámenes conforme a las ganancias que obtienen porque realizan inversiones y generan empleos en el país.

El empresario Roberto González Barrera consideró que el gobierno debe ser más austero, porque desgraciadamente México no cuenta con fondos suficientes.

Entrevistado antes de la inauguración del hotel St. Regis, el dueño de Grupo Maseca y Banorte señaló que el llamado de Calderón a que los empresarios paguen impuestos obedece a que el país vive una situación insólita por falta de recursos. Jamás habíamos vivido un momento como éste. Imagino que lo que (el Presidente) hizo sentir al público es que nos uniéramos, refirió.

Se negó a opinar acerca del pago de impuestos. Señalar que su empresa es pública y está vigilada por la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, por tanto, es muy distinta a las privadas.

Las empresas pagan lo que por ley tienen que pagar, obviamente tienen un régimen fiscal legal. No necesariamente van a estar pagando sobre sus ingresos porque se debe considerar que las que más invierten tienen impuestos que se deducen, dijo el dirigente del CCE, entrevistado en la inauguración del XVI Congreso del Consejo Empresarial Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología, que se realiza en Juriquilla, Querétaro.

Paredes Arroyo desestimó los cálculos de la Auditoría Superior de la Federación y de Hacienda sobre la contribución de las grandes empresas al fisco: no sabemos qué tan confiable sea la información; en el caso de la consolidación, las cifras que presentaron a los legisladores no tenían solidez.

Acotó que si pudiera darse el caso de que algún grupo o compañía cometa abusos sobre el pago de impuestos, lo que tiene que hacer Hacienda es su tarea de fiscalizar y quien esté fuera de la ley que pague las consecuencias.

En la ciudad de México, el CCE divulgó un comunicado con la posición del organismo: tras insistir en que las empresas de la economía formal pagan impuestos de acuerdo con la ley, lamenta que el debate sobre la ley de ingresos haya polarizado a la sociedad con medidas mal concebidas, mal fundadas y retroactivas.

El CCE resaltó que los empresarios están de acuerdo en que cumplamos, pero todos. No sólo los de siempre, y llamó al diálogo y a la libre expresión de ideas, porque no es momento de discordias, sino de llegar a acuerdos. Sigamos trabajando para alcanzarlos y para evitar que México siga en el estancamiento y la mediocridad.

Las empresas de la economía formal, insistió, pagan sus impuestos de acuerdo con lo que marca la ley y el gobierno las audita.

El presidente de Grupo Salinas, Ricardo Salinas Pliego, propuso que el presidente Calderón mande al SAT (Servicio de Administración Tributaria) a supervisarlas (a las empresas) si, como dice, no pagan impuestos.

Si las empresas no pagaran ISR, entonces ¿de qué vive el gobierno?, declaró tras la inauguración del séptimo Foro Móvil de la Asociación Hispanoamericana de Centros de Investigación y Empresas de Telecomunicaciones.

Propuso un recorte de 8 por ciento al gasto público, que liberaría 240 mil millones de pesos. La solución, dijo, es que el gobierno gaste menos y que gaste bien.