El jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, presentó a la Cámara de Diputados una solicitud de 15 mil millones de pesos adicionales para obras de infraestructura y seguridad, y ante las críticas del PAN reviró: no venimos a estirar la mano, sino a plantear y demandar respetuosamente que la ciudad tenga el trato que se merece, porque es el principal contribuyente del país.

Durante dos horas, el funcionario capitalino defendió ante los diputados de la Comisión de Presupuesto la política de endeudamiento y de inversión, y llamó a los legisladores a asumir un acuerdo político que revierta, dijo, el trato discriminatorio hacia la ciudad de México.

Les propongo que tomemos una decisión política para que este trato de exclusión, desventajoso para los ciudadanos, no se mantenga. No tiene sentido político, estratégico ni económico para el país. Una ciudad con más respaldo y mejor trato contribuirá al desarrollo del país. Una ciudad con el mismo trato de ahora llevará durante más tiempo a perder competitividad a un costo social más alto, expresó.

Al enlistar los proyectos prioritarios para 2010, Ebrard refirió que se requiere complementar el esfuerzo del gobierno de la ciudad para continuar con la línea 12 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, que forma parte de un amplio programa de transporte público.

A pregunta expresa del coordinador del PVEM, Juan José Guerra Abud, Ebrard refirió que el gobierno capitalino recibió 11 trenes nuevos para el Metro, y que el próximo año se iniciará la rectificación de la Línea A, porque en toda la salida hacia Puebla el suelo es difícil, y pone en riesgo la línea, que es férrea y superficial.

También, dijo, se prevé hacer crecer el sistema Metrobús, que diariamente transporta 500 mil personas, así como acelerar el cambio a corredores sin emisiones de varias avenidas principales.

Agregó que ya fueron sustituidos 45 mil taxis, que el programa de transporte escolar obligatorio va en tiempo respecto de lo previsto, y adelantó que ya se iniciaron pruebas con vehículos híbridos para cumplir con servicios públicos, incluido el de recolección de basura.

En materia de seguridad pública, dijo que se busca cambiar el paradigma de que, aumentando el personal y las patrullas se combatiría la delincuencia. Sí, es útil, pero no alcanzaría para cumplir con esta ecuación personal-patrullas.

Se inició, entonces, el proyecto para instalar 11 mil 200 cámaras de vigilancia, de las cuales se han instalado más de 2 mil en el STC y más de 2 mil en cuatro delegaciones. Del total, 80 vigilan embajadas; 100, inmuebles federales; 80, edificios paraestatales, organismos descentralizados y sistemas estratégicos definidos así por el gobierno federal.

Se requieren, expuso, recursos para reforzar la atención a la influenza estacional y a la A/H1N1, sobre todo porque ha cambiado el perfil demográfico y la edad de la población afectada creció en pacientes de entre 5 y 15 años de edad.

En proyectos de las delegaciones, detalló, se requieren mil millones de pesos, así como mil 200 millones más para obras como el drenaje profundo, mil 100 millones de pesos para el plan climático y mil millones en los proyectos de protección civil.

Exhortó a la Cámara a tomar una decisión sobre la política de valor de suelo que se aplica para la entrega de créditos de vivienda del Infonavit, pues el valor actual ha obligado a las constructoras a desarrollar zonas habitacionales fuera de la capital a pesar del impacto social que conlleva, el efecto en la calidad de vida y los costos agregados de servicios, transporte, agua, educación y salud, que son muy altos.