Colima, Col., 28 de octubre. El gobierno del estado busca privatizar la playa La Boquita, en el municipio de Manzanillo, para convertirla en un conjunto turístico que desplazará a una decena de restauranteros y a miles de bañistas, aseguraron la organización ambientalista Bios Iguana y la asociación civil Amigos de Colima.

La Secretaría de Turismo local anunció la semana pasada un megaproyecto en la laguna de Juluapan, aledaña a La Boquita, que generó controversia entre el gobernador Silverio Cavazos Ceballos y el delegado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Raúl Arredondo Nava, pues se adelantó que la obra estaba por empezar, pero la dependencia federal no ha autorizado la manifestación de impacto ambiental.

El 21 de octubre el secretario de Turismo estatal, Sergio Marcelino Bravo Sandoval, informó que el megaproyecto de Juluapan incluye condominios, residencias, hoteles, un centro de convenciones y hasta un hospital especializado en cirugía plástica, en nueve hectáreas de la zona de La Boquita.

Habrá también una marina y se realizarán obras de dragado, colocación de escolleras, muros de contención y una zona de restaurantes, adonde el gobierno estatal ofreció reubicar a empresarios de La Boquita. La compra de los terrenos y las obras implicarán una inversión de 11 millones 100 mil dólares, de los cuales el gobierno estatal recibirá poco más de 5 millones de dólares por la venta de las nueve hectáreas a la empresa desarrolladora.

El director general del desarrollo habitacional Marina de Santiago, que forma parte del proyecto laguna de Juluapan, es el ex secretario de Fomento Económico estatal Carlos Aguirre Ceballos, y el notario a cargo de expedir los títulos de propiedad es Marcelino Bravo Jiménez, padre del secretario de Turismo, Bravo Sandoval.

Bios Iguana, Amigos de Colima y el Colectivo de Cultura Alternativa Lo de Menos pidieron al diputado federal por Colima Leoncio Morán Sánchez intervenir para que se revise el proyecto.