Tras casi cinco años de investigaciones, el Instituto Federal Electoral (IFE) finalmente desahogará las quejas de PAN y PRI contra el PRD relacionadas con los denominados videoescándalos y el presunto financiamiento ilegal del sol azteca derivado de aportaciones privadas. Aunque el organismo da por acreditadas triangulaciones irregulares con el empresario Carlos Ahumada, se indica que no hay elementos probatorios que corroboren que el dinero llegó al PRD.

En el dictamen, de la Unidad de Fiscalización, que se discutirá este viernes durante la sesión del Consejo General del IFE, se hace un largo seguimiento de las operaciones entre el Gobierno del Distrito Federal, las delegaciones Gustavo A. Madero, Álvaro Obregón y Tláhuac, Ahumada y el ex perredista René Bejarano.

Sin embargo, una de las conclusiones a las que llega el dictamen indica: Queda excluida toda posibilidad de que los recursos en dinero que el Gobierno del Distrito Federal entregó a las citadas empresas mexicanas de carácter mercantil sean los mismos que recibió el citado René Juvenal Bejarano y, consecuentemente, que los recursos en dinero que el Gobierno del Distrito Federal entregó a las citadas empresas mexicanas de carácter mercantil hubiesen sido utilizados por dicho partido político para sufragar gastos de campaña de sus candidatos a diputados federales en el proceso de 2003.