17 de octubre de 2009     Número 25

Directora General: CARMEN LIRA SAADE
Director Fundador: CARLOS PAYAN VELVER

Suplemento Informativo de La Jornada



NOTAS: PEF= Presupuesto de Egresos de la Federación; PPEF= Proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación Federal. FUENTE: CEDRSSA, con
base en el Decreto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2009 (D.O.F. de 28/11/2008) y Proyecto de Decreto 2010. (Paquete Económico 2010, SHCP).

Las cifras arrojan conclusiones: el proyecto del Ejecutivo para el Presupuesto Especial Concurrente para el Desarrollo Rural (PEC) 2010 confi rma la tendencia de los años recientes: se refuerza el gasto social, particularmente el de corte asistencialista, para atender a la población rural, y al mismo tiempo se limita el gasto en inversión pública para infraestructura y para impulsar las capacidades productivas de los agricultores. En la propuesta del PEC 2010 el aumento en la vertiente social, de 20.9 por ciento real respecto de 2009, se centra fundamentalmente en un alza de 44.3 por ciento para el programa Oportunidades, de ataque a la pobreza, que contaría con 28 mil 863.6 millones de pesos, y un incremento de 224.3 por ciento en el programa de Apoyo Alimentario en Zonas de Alta Prioridad, que da apoyos en especie, y que sumaría tres mil 224.3 millones. Ya entre 2005 y 2009 el recurso público en manos de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol), responsable principal del gasto social, se elevó en 213 por ciento en términos nominales, al tiempo que el de la Secretaría de Agricultura, enfocada al gasto productivo del campo, creció en un ritmo mucho menor, en 53 por ciento. En la propuesta del Ejecutivo para el PEC 2010 se observan caidas en las vertientes de infraestructura y económica, y destacan particularmente las bajas de 34.3 y 31.8 por ciento, respectivamente en comparación con 2009, planteados para caminos rurales y para infraestructura hidroagrícola.

Hay una constante: que los proyectos de presupuesto del Ejecutivo para la Secretaría de Agricultura son siempre elevados por el Congreso, pero a la hora de ejercerlos, quedan sin aplicar entre mil y dos mil millones de pesos. En cambio, en donde el Ejecutivo tiene interés, en la política asistencial de la Sedesol, se observa que los recursos aprobados por el Congreso terminan elevándose significativamente en el ejercicio. Esto se observa en forma creciente a partir de 2006.