Ciudad Juárez, Chih., 10 de octubre. El Congreso de Chihuahua acordó exhortar a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (Sagarpa) a que rechace las 24 solicitudes para sembrar maíz transgénico que existen en ese estado, además de Sonora, Sinaloa y Tamaulipas.

El punto de acuerdo, que se votó por unanimidad, fue presentado por Armando Muñoz Ponce, diputado del Partido Revolucionario Institucional, y está dirigido al Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica), que depende de la Sagarpa.

Muñoz Ponce afirmó que en los estados fronterizos es donde se busca con mayor insistencia cultivar maíz genéticamente modificado, a pesar del rechazo de campesinos y organizaciones agrícolas por el daño que puede ocasionar a especies criollas.

Esa siembra, destacó, no ha demostrado que sea mejor en calidad y cantidad. Sí, en cambio, se han observado perjuicios.

Tiene la desventaja de que la semilla es más cara y debe comprarse cada año a una empresa trasnacional. Además, contamina los cultivos criollos y luego las trasnacionales pueden exigir pagos por las cosechas, añadió el legislador en la exposición de motivos.

Aparte, los estudios acerca de si esos productos perjudican la salud de los consumidores son incompletos. Por ello, la siembra de esa semilla debe prohibirse hasta que se tenga la certeza de qué daños causa.

Previamente había sido presentada una propuesta similar en tribuna por Víctor Quintana Silveyra, legislador del Partido de la Revolución Democrática, la cual contó con el aval de las bancadas de los partidos Acción Nacional, del Trabajo, Verde Ecologista de México y Nueva Alianza, a pesar de lo cual no fue sometido a votación, ya que la oposición no logra mayoría.

Para Quintana, existen intereses de algunos funcionarios de dependencias federales agrarias, quienes insisten en incorporar la siembra de ese maíz al campo mexicano sin tomar en cuenta los daños que podría ocasionar.

En Delicias, los primeros experimentos

De hecho, en Chihuahua está programado comenzar en 2010 el cultivo experimental de maíz genéticamente modificado, luego de que el Senasica avalara solicitudes de las empresas Dow Agrosciencies y Monsanto.

Rubén Chávez Villagrán, presidente del Consejo Estatal Agropecuario, confirmó que en la zona de Delicias se realizarán los experimentos previos a la producción en masa de ese tipo de semillas, específicamente maíz, debido a que en otras regiones de Chihuahua ya se cultivan transgénicos, como soya y algodón.

El especialista destacó que por el momento la ley de protección a organismos genéticamente modificados continúa en proceso, y a la fecha las empresas antes mencionadas han sido las que han solicitado hacer las pruebas en la región occidente.

Resaltó: en la primera etapa se cultiva una hectárea por parcela demostrativa, en la que se obtiene la cosecha para fines meramente de análisis, pero el grano así cultivado será destruido. Para 2011 se realizará una segunda siembra y el producto ya no será destruido, aunque tampoco se comercializará. En la tercera y última etapa se cultivarán superficies más grandes y la cosecha se comercializará a la par de la producción tradicional.

Durante las tres fases intervendrán cinco secretarías federales: Agricultura, Hacienda, Salud, Medio Ambiente y Economía. Además, los campesinos que accedan a la experimentación en sus tierras e instituciones educativas y de investigación.