Difunde en Internet 11 preguntas y respuestas sobre supuestos beneficios y despeja
dudas
Lunes 28 de septiembre de 2009, p. 25
Como parte de su estrategia para lograr la aprobación del paquete fiscal 2010, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) arrancó vía Internet un proyecto de difusión de preguntas y respuestas sobre el paquete económico para 2010
en varias entregas, con el que pretende despejar supuestas dudas sobre el contenido de la propuesta presupuestal para el año entrante.
En una nota técnica
de su primera parte
, la dependencia arranca con una exaltación de que la del año entrante es una propuesta responsable
, que busca contener los efectos negativos del ciclo económico adverso, de la disminución de los ingresos petroleros y de los provocados por una de las recaudaciones más bajas de América Latina tanto en la inversión, como en el crecimiento económico futuro.
La SHCP arrancó su estrategia de difusión el jueves de la semana pasada con la divulgación de un mensaje del subsecretario Alejandro Werner que sólo fue difundido por Internet y en el que se hacía énfasis en que los ingresos petroleros como parte fundamental del gasto público habían llegado a su final, y sobre la necesidad de consolidar nuevas fuentes de recaudación fiscal.
Según los cálculos de la SHCP, la base tributaria se ampliará en 4 millones de nuevos contribuyentes sólo por el impuesto a depósitos en efectivo (IDE) y el del combate a la pobreza; el mayor peso del nuevo impuesto al consumo, afirma, recaerá en los deciles más altos, es decir, 74 de cada cien pesos recaudados adicionalmente serán aportados por las clases de mayores ingresos.
En suma, son 11 preguntas y respuestas iniciales para sustentar la propuesta económica que pemitiría ir sentando las bases de una política de mayores ingresos no petroleros del sector público, permanentes y sustentados en pilares sólidos
.
No explican ineficiencias fiscales
En la nota técnica
que aparece en la página electrónica de la SHCP se reconoce la baja recaudación tributaria, pero no se explican las razones de la ineficiencia de las autoridades fiscales; se justifican los nuevos impuestos y las alzas a los existentes con el hecho de que México no es el único país que sigue ese camino.
Sobre el tema de los gravámenes fiscales, uno de los más controvertidos y que han recibido mayor número de críticas, la SHCP plantea la pregunta: ¿Es un error proponer un aumento de impuestos en plena crisis?
Responde: “La realidad mexicana no es tan simple. El costo de no hacerlo –incrementar por la vía tributaria los recursos gubernamentales– sería mucho mayor puesto que el deterioro de las finanzas públicas definitivamente ahuyentaría el capital, frenando la inversión, el crecimiento económico y perjudicando aún más el empleo”.
Los otros puntos controvertidos en el paquete económico 2010 son la contribución para el combate a la pobreza; los beneficios del impuesto empresarial a tasa única (IETU); el impuesto a telecomunicaciones y el aumento en la tasa de impuesto sobre la renta.
Del primero, la SHCP argumenta: la recaudación total de los recursos que se obtengan será focalizada a combatir la pobreza, lo que permitirá aumentar en 800 mil el número de beneficiarios del programa Oportunidades, y alcanzar por primera vez a los pobres urbanos, además de elevar el presupuesto de otros programas sociales.
Del IETU sostiene que desde su aplicación en 2008 ha contribuido a mejorar la equidad del sistema tributario y la recaudación, al actuar como un impuesto de control que complementa el ISR.
Respecto del impuesto a las telecomunicaciones, sostiene que conlleva un importante grado de progresividad, pues recae en mayor medida en los grupos de altos ingresos
.
Del aumento en el ISR insiste en su temporalidad, tres años. Más de 10 millones de trabajadores no se verían afectados. Al mantenerse sin cambio el subsidio para el empleo, se garantiza que casi 9 millones de trabajadores con ingresos gravables de alrededor tres salarios mínimos continúen recibiendo un subsidio en efectivo, en lugar de pagar el impuesto, refiere.
Recalca: Tampoco afectará a la mayoría de las pequeñas y medianas empresas, pues casi 44 por ciento de 7.5 millones de personas físicas con actividad empresarial tributan bajo el régimen de pequeños contribuyentes
.