En un momento de recesión económica, la banca comercial que opera en el país redujo el financiamiento a actividades productivas, mientras el incremento del desempleo y la pérdida en la capacidad adquisitiva de las familias provocaron un aumento en la morosidad entre deudores de préstamos hipotecarios, de acuerdo con información oficial divulgada este jueves.

El crédito de la banca comercial para actividades empresariales disminuyó en agosto pasado a 872 mil millones de pesos, 2 mil 500 millones de pesos menos que el que estaba colocado a finales de 2008, indicó un reporte estadístico de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), organismo supervisor del sistema financiero.

En medio de esta reducción del financiamiento, las empresas comenzaron a resentir los efectos de la caída en el consumo y la merma en sus operaciones, lo que se reflejó en un incremento de su cartera vencida en préstamos bancarios.

La información de la CNBV indicó que la cartera vencida entre empresas que tienen préstamos con la banca comercial que opera en el país subió a 18 mil 486 millones de pesos, cantidad que representó un disparo de 46.6 por ciento, respecto del nivel de 12 mil 608 millones de pesos de diciembre de 2008.

El índice de morosidad, que mide el porcentaje de préstamos vencidos respecto de los préstamos totales, aumentó –en el caso de los créditos bancarios a empresas– de 1.44 por ciento en diciembre de 2008 a 2.12 por ciento en agosto pasado, según los datos divulgados por la CNBV.

Otro dato que reflejó la situación de apremio económico por la que atraviesa un sector relevante de la población fue el comportamiento de los pagos en préstamos para adquisición de vivienda, segmento de actividad en que la banca comercial inyectó grandes cantidades de crédito en los últimos años.

Entre 2005 y 2008 la banca privada canalizó unos 160 mil millones de pesos al financiamiento de vivienda, que había registrado modestas tasas de crecimiento después de la crisis de 1995. En los últimos cuatro años el crédito hipotecario creció a una tasa promedio anual de 38 por ciento, según datos de la Asociación de Bancos de México.

En la información divulgada ayer, la CNBV dio cuenta de que el crédito bancario a la vivienda llegó en agosto a 300 mil millones de pesos, 14 mil 500 millones de pesos más que el registrado en diciembre de 2008.

La cartera vencida entre los deudores de préstamos hipotecarios se situó el mes pasado en 13 mil 470 millones de pesos, cantidad que representó un crecimiento de 34.4 por ciento en comparación con los 10 mil 22 millones de pesos observados en diciembre, añadió la CNBV.

En el caso de los préstamos a la vivienda, el índice de morosidad en agosto fue de 4.49 por ciento, prácticamente un punto arriba del 3.51 por ciento registrado al cierre del año anterior.

Entre agosto de 2008 y el mismo mes de este año, 530 mil personas que tenían un empleo formal fueron despedidas, de acuerdo con datos del IMSS.

En tanto, la población que está desocupada llegó el mes pasado a 2 millones 870 mil personas, que representan 6.28 por ciento de la población económicamente activa, la tasa más alta en nueve años, reportó el Inegi.

En la información divulgada ayer, la CNBV reportó que la cartera vencida en los préstamos al consumo, renglón que incluye las tarjetas de crédito, disminuyó en agosto pasado a 34 mil 272 millones de pesos, 17.1 por ciento menos que los 41 mil 375 millones reportados en diciembre de 2008.

El monto de préstamos al consumo bajó el mes pasado a 408 mil millones de pesos, 72 mil 800 millones de pesos menos que en diciembre anterior.