Santa María Totolapilla, Oax., 18 de septiembre. Nadie debe rendirse ni hacerse a un lado en la lucha por cambiar la vida pública de México, cuando cada vez hay más pobreza, más desempleo, más carestía y mayor inseguridad, advirtió aquí Andrés Manuel López Obrador.

Este movimiento ha frenado las ambiciones del grupo que se apoderó de todas las instituciones y realmente gobierna el país; ellos son los que no han querido que este movimiento tome fuerza, pero ya mucha gente está consciente de que hace falta un verdadero cambio. Por eso hemos traído a Felipillo a mecate corto y así lo vamos a seguir trayendo. Tenemos que seguir adelante porque nos asiste la razón, y la razón siempre triunfa, apuntó el tabasqueño.

Se trata –explicó– de propiciar un cambio de manera pacífica, no violenta, a pesar de que haya quienes proponen ese camino como única solución para modificar las cosas. Yo respeto esa opinión, pero no la comparto; el enfrentamiento no es la respuesta, ya que eso daría a los mafiosos la oportunidad de condenar este movimiento.

De manera enfática rechazó la confrontación entre hermanos y sostuvo que para el cambio pacífico se requiere mucha perseverancia, mucha terquedad, defender los principios y no ceder a las tentaciones de los potentados. Si fuéramos ambiciosos comunes y buscáramos el poder por el poder ya hubiéramos negociado con la mafia, ¡pero eso nunca!, no somos como el resto de los políticos fantoches y corruptos”, subrayó.

El ex candidato presidencial recordó que el año pasado, de manera pacífica, el movimiento que encabeza consiguió detener el intento de privatizar el almacenamiento, la refinación, la construcción de ductos y la explotación del petróleo, que es lo que más ambicionan, a pesar de haber privatizado ya Teléfonos de México, los bancos, los ferrocarriles, la industria eléctrica y las líneas aéreas. Por oponernos nos han querido destruir políticamente, pero no lo han conseguido.

Al reiniciar este martes su sexta gira por los municipios de usos y costumbres de esta entidad, el tabasqueño condenó que en momentos en que el salario ya no alcanza ni para cubrir las necesidades básicas de las familias, el gobierno espurio se empeñe en seguir exprimiendo al pueblo.

Se cayó la economía 10 por ciento, suben las medicinas, la luz, el gas, el pasaje, lo que equivale a mayor pobreza, y sobre este sufrimiento se quiere que la gente pague más impuestos, ya no el 15 por ciento de IVA, sino el 17 para unas cosas, y para otras, como el uso del teléfono celular o el servicio de Internet, hasta 4 por ciento más, lo que equivale a 21 en total; eso no podemos permitirlo, apuntó.

Acompañado por los senadores Gabino Cué, de Convergencia, y Salomón Jara, del PRD, López Obrador recordó que este lunes, a las 17 horas, se reunirán frente a la Cámara de Diputados para entregar una propuesta alternativa de Presupuesto de Egresos y Ley de Ingresos, que defiende la economía popular contra los embates del gobierno usurpador que pretende mayores sacrificios de los mexicanos.

Consideró que la situación se tornará insoportable y habrá mayor sufrimiento y desesperación entre la mayoría de los mexicanos si los legisladores priístas y panistas aprueban la propuesta calderonista, que se resume en un incremento en los precios y tarifas de bienes y servicios, como las gasolinas, el diesel, la energía eléctrica y el gas.

Sabemos que si se aprueba el aumento en las gasolinas, todo aumenta de precio, afirmó López Obrador. La consecuencia del mayor desempleo es la inseguridad y la violencia, advirtió a lo largo de su recorrido por los municipios de Santa María Quiegolani, Santa María Ecatepec, Santa María Totolapilla, Asunción Tlacolulita y San Miguel Tenango.