El Seguro Popular suspendió la afiliación de familias a partir de la última semana de agosto y hasta en tanto se defina en la Cámara de Diputados el presupuesto que se asignará a este esquema. Mientras, la meta de inscripción para el próximo año está en función de que los legisladores aprueben la iniciativa de reforma a la Ley General de Salud, a fin de que los recursos se asignen por persona y ya no por familia, afirmó Salomón Chertorivski, titular de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS).

De aprobarse el proyecto, en 2010 se sumarían 5 millones de nuevas familias a este que se considera el tercer pilar de la seguridad social en México. En 2009, se inscribieron 1.4 millones de hogares, dijo, para luego subrayar que la iniciativa de modificación legal tiene como principal objetivo mejorar la eficiencia en el manejo de los recursos y evitar los excesos en el gasto.

En entrevista, Chertorivski explicó que la decisión de interrumpir la inscripción de familias se originó por la confluencia de varios factores, como la situación económica, y el reconocimiento de que los cálculos que se hicieron en el diseño del Seguro Popular no corresponden con la realidad, pero ahora tenemos la oportunidad de adecuarlos.

Transferencias a estados

Se refirió, en particular, a que las transferencias de dinero para los estados se realizan en función de familias integradas por 4.3 personas en promedio, cuando en la práctica los hogares se componen de 2.95 individuos, en promedio. Además, 25 por ciento de esos núcleos son unipersonales.

Si los legisladores autorizan el cambio a la ley será posible aumentar en más de cuatro veces, en sólo un año, el número de beneficiarios del Seguro Popular, indicó Chertorivski.

Por ahora, con el techo presupuestal asignado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, de 23 por ciento de aumento en términos absolutos, sólo se garantiza para 2010 la afiliación al Seguro Popular a través de los programas Seguro Médico para una Nueva Generación y Embarazo Saludable.

Se lograría un poco más con la depuración –en curso– del padrón de beneficiarios para evitar duplicidades con otras instituciones de seguridad social, el cumplimiento de los compromisos estatales y la posibilidad de que 10 por ciento de las familias decida no renovar su afiliación.

El funcionario calculó que con esto el número de familias inscritas llegará a 10.5 millones, aunque la meta inicial era de 10.9 millones. Comentó que también influyó en la decisión de interrumpir la afiliación al Seguro Popular que algunos estados informaron que carecen de los recursos para cumplir con la aportación solidaria estatal que por ley deben hacer al esquema.

De hecho, seis entidades federativas están pendientes de enviar a la CNPSS la comprobación de que ya asignaron ese dinero. Aunque todavía están en tiempo para cumplir con lo que establece la ley, algunos de esos estados también solicitaron que se detuviera la inscripción de familias. El paréntesis es para replantear las metas, señaló Chertorivski, y detalló que únicamente se mantiene la inscripción al Seguro Popular de los recién nacidos, las mujeres embarazadas y los casos urgentes, como los de cáncer cérvico uterino.