La práctica de evadir impuestos como una unidad de negocios orilló a la Secretaría de Hacienda a proponer al Congreso de la Unión cambios al Código Fiscal que la doten de nuevas facultades y mejores instrumentos de cobranza, como el aseguramiento precautorio y el cobro en las cuentas bancarias, afirmó Alfredo Gutiérrez Ortiz Mena, jefe del Servicio de Administración Tributaria (SAT) .

Esto permitirá evitar que lo que debió ser una utilidad para el gobierno no resulte en pérdidas a fondo perdido, precisó el funcionario. El jefe del SAT calificó de profunda la reforma fiscal propuesta por la Secretaría de Hacienda a la Cámara de Diputados, porque incrementará la recaudación y permitirá sustituir lo que hoy no tenemos: los ingresos petroleros. Hemos consumido parte de nuestra riqueza nacional y hay que sustituirla, y esto implica el replanteamiento de todas las finanzas públicas de este país, manifestó.

Pero también es relevante elevar la eficiencia recaudatoria, dijo, y para ello es importante que la cobranza impositiva se vea como parte del proceso de auditoría y de la programación, a la par de requerir de instrumentos más ágiles para hacerse efectivos en el momento del cobro. Los cambios propuestos al Código Fiscal pretenden garantizar y agilizar el cobro.

El impuesto de 2% hará visibles a sectores con fines fiscales

Explicó: no basta con ganar un juicio, pues una vez que esto ocurre hay que seguir una serie de procedimientos para hacer efectivo el cobro. Esto abre espacios para que el contribuyente vacíe sus cuentas bancarias, cambie de domicilio y realice otros movimientos que impiden que los recursos finalmente lleguen al erario. El eje vertebral de la administración tributaria es cruzar información y reducir riesgos, apuntó.

Informó que 80 por ciento de las devoluciones a grandes contribuyentes por el impuesto al valor agregado (IVA). En el sector automotriz la devolución llegó a 40 mil millones de pesos.

Según la Secretaría de Hacienda, la cartera por recuperar del SAT asciende a 468 mil millones de pesos, y con frecuencia, afirma, algunos contribuyentes evaden el pago de esa cartera al mover sus recursos financieros entre cuentas, e inclusive al exterior.

El jefe del SAT, por su parte, subrayó que, como en el caso del impuesto a depósitos en efectivo (IDE), el nuevo gravamen de 2 por ciento al consumo para el combate a la pobreza, hará visibles a segmentos de la población que no se tienen identificados con fines fiscales, y que en el caso de que no llegara a aprobarse ese gravamen, la administración tributaria continuará con su tarea de ampliar la base de contribuyentes, pero sería más lenta.

En su opinión, es más eficiente transferir recursos hacia la gente que los requiere que abrir un boquete por subsidio fiscal o tasa cero. Para eso es el nuevo impuesto.

Grandes corporativos adeudan alrededor de 500 mil millones de pesos, según cifras oficiales

Víctor Cardoso y Juan Antonio Zúñiga

La Secretaría de Hacienda se irá hasta las cuentas bancarias de los contribuyentes para cobrar los impuestos atrasados de manera directa y sin la intermediación de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV).

Actualmente un universo de casi 1.5 millones de contribuyentes, en particular grandes corporativos, adeudan alrededor de 500 mil millones de pesos catalogados como créditos fiscales. De esa cifra, 45 por ciento, alrededor de 210 mil 600 millones, se encuentran en litigio en los tribunales, revela información oficial de la Secretaría de Hacienda.

La argumentación de las autoridades fiscales es que con frecuencia los contribuyentes evaden el pago de los créditos fiscales moviendo sus recursos entre diversas cuentas o incluso enviándolos al extranjero.

Como parte de la estrategia para fortalecer la cobranza de las contribuciones, la Secretaría de Hacienda busca además que jurídicamente se asigne a esa dependencia el papel de víctima u ofendido en los delitos fiscales para que sólo mediante su perdón o solicitud, las autoridades judiciales suspendan los procesos para que pueda extinguirse la acción persecutoria del Estado, es decir, la aplicación de acciones punitivas, incluida la cárcel. La intención es generar una cultura del pago, sentenció la dependencia.

A partir de diversas experiencias de procesos penales por delitos fiscales en el pasado se ha interpretado equívoca e infundadamente que por haberse cubierto el monto de los créditos fiscales respecto de los cuales se inició un proceso penal, se entiende otorgado tácitamente el perdón y, por ende, se decrete el sobreseimiento de los referidos procesos. Sin embargo, el pago espontáneo no es causa automática de extinción de la acción punible del Estado en esta materia, en razón de que a través de los delitos fiscales se ha pretendido también el engaño y la evasión de las obligaciones fiscales y no exclusivamente sus resultados económicos, argumentó la dependencia.

Hacienda, de hecho, ya solicitó al Congreso de la Unión las modificaciones necesarias al Código Fiscal de la Federación para que, como cualquier particular, pueda participar en los procesos penales como víctima u ofendido.

Para sustentar su petición ante el Poder Legislativo, la dependencia federal señaló que el Servicio de Administración Tributaria (SAT) tiene una cartera de créditos fiscales por 468 mil millones de pesos. Tanto para evitar que esa cartera se incremente como para hacer eficiente su cobranza sería necesario, dijo, fortalecer el aseguramiento precautorio de bienes muebles e inmuebles de los deudores fiscales y recuperar créditos firmes efectuando el cobro correspondiente en las cuentas abiertas en el sistema financiero de manera directa sin la intermediación de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores.

La vida en tribunales

De acuerdo con información del SAT, hasta mediados de este año se habían entablado 17 mil 873 juicios fiscales en primera instancia. A este nivel la dependencia ganó menos de la mitad, es decir, 8 mil 773; otros mil 902 fueron declarados en nulidad para efectos, en los cuales la autoridad fiscal conserva las facultades para determinar y, en su caso, cobrar los créditos impugnados. Pero, en esta instancia, los causantes ganaron otros 7 mil 198 procesos. En segunda instancia se registraron 7 mil 859 juicios, de los cuales el SAT perdió 3 mil 60 y ganó 4 mil 799.

Por su monto económico, los juicios ganados por la autoridad fiscal representaron la recaudación de 16 mil 152 millones de pesos en los primeros seis meses del año, aunque faltarían otros 3 mil 952 millones correspondientes a los catalogados como de nulidad para efectos. Los juicios perdidos en primera instancia representaron 11 mil 895 millones de pesos.