El técnico Jesús Ramírez aseguró que el América tiene los pies firmes en la tierra y sus pupilos no se han trepado a las nubes tras la paliza asestada al Toluca.

Veo al equipo muy humilde, sostuvo. No obstante, se concedió libertad para expresar que paladear el liderato es muy agradable, y resumió: Tengo al mejor equipo, hoy lo confirmo con números.

El campeón del mundo con la Sub-17 en el Mundial de Perú 2005 señaló que la fórmula con las Águilas es sin duda el trabajo mental, el mismo que aplicó en 2005: “Es un todo, el equipo ha crecido, se ha preparado...

La madre de toda esta situación es la mente, he trabajado ese aspecto igual que lo hice con los chavos. Me gusta ver primero a la persona y luego al jugador. Tenemos charlas, vemos películas, escuchamos música.

Precisó que ya quedó atrás la etapa de adaptación y ahora todos están sintonizados, inclusive los que no estaban acostumbrados a esas cosas.

Para muestra un botón. El zaguero Ricardo Rojas llegó ayer (jueves). Tuvo la posibilidad de estar unos días con su mamá por cuestiones familiares. Es decir, la persona tiene prioridad sin que lo resienta el equipo, pues en el banquillo hay relevos suficientes.

Chucho adelantó que Rojas se sumará a las bajas del plantel, que en total serán cinco, pero está confiado porque los que han entrado de cambio lo han hecho bien, quizá con características diferentes, pero igual son buenos jugadores.

A la afición americanista explicó que será difícil repetir marcadores como el de la fecha seis ante los Diablos Rojos (7-2): Hoy en el futbol mundial no es fácil meter tres goles... Ojalá pudiera ser siempre como contra el conjunto mexiquense, pero para sumar los puntos que buscamos con el 1-0 sería suficiente.

Recalcó que buscarán jugar con la misma propuesta tanto de locales como en calidad de visitantes: hay que mantener el buen juego y pensar en ganar. El partido contra Toluca ya quedó en el pasado, ahora hay que volver a ganar, porque estamos conscientes de que el trabajo nos ha puesto ahí (en la cima).

Luego de la práctica matutina en las instalaciones de Coapa, y antes de viajar a Monterrey, Ramírez dijo que Tigres es un buen equipo y su afición, considerada entre las mejores del país, no debe influir en el resultado.

Agregó que para su plantel ha sido fundamental transformar la presión que habitualmente rodea al equipo, en motivación.

Finalmente, comentó que le gustaría que a la liguilla llegaran los mejores ocho equipos del torneo regular y no como sucedió la temporada pasada.