Ayer se alcanzó en el Senado un acuerdo para destrabar el proceso legislativo para la elección del presidente de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), luego de que la Junta de Coordinación Política (JCP) propuso que las comisiones de Justicia y de Estudios Legislativos participen sólo como apoyo, y que sea la de Derechos Humanos –que preside la senadora Rosario Ibarra, del PT– la que dirija el procedimiento.

Previo al inicio de la sesión ordinaria, la JCP se reunió por la mañana con la senadora Ibarra de Piedra para exponerle el acuerdo a que había llegado la mayoría de los coordinadores de los grupos parlamentarios.

En ese encuentro, la senadora manifestó a los coordinadores parlamentarios que la ley y la Constitución señalan que es la comisión del ramo la que dirigirá el proceso de sucesión en la CNDH.

“Lo establece la ley y así ha sido en las últimas dos elecciones del titular de la CNDH; en la de 1999, cuando el Senado designó por primera vez a José Luis Soberanes Fernández ombudsman nacional, y luego en la de 2004, cuando lo ratificó para un nuevo periodo de cinco años”.

La legisladora insistió en su planteamiento,para que el proceso no empiece viciado de origen o de manera irregular.

El coordinador de los senadores del PT, Ricardo Monreal, dijo que en ese encuentro Ibarra de Piedra mantuvo su posición de que el proceso sea abierto, transparente y que los medios de comunicación puedan estar presentes en las comparecencias de los aspirantes, y que las reuniones de trabajo sean públicas.

Ibarra de Piedra señaló que este lunes dará respuesta a la Junta de Coordinación Política respecto a si es necesario que participen las comisiones de Justicia y de Puntos Constitucionales, y entregaría la propuesta de convocatoria para el proceso de elección.

Manifestó que este fin de semana se reunirá con organizaciones civiles y con el Comité Eureka, a las que les expondrá la propuesta del Senado.

En tanto, durante el seminario México ante la renovación de sus instituciones, organizado por el Instituto de Investigaciones Jurídicas (IIJ) de la UNAM, se dijo que más allá de cumplir con los requisitos marcados en la ley, el próximo titular de la CNDH debe asumirse como defensor de los intereses de la ciudadanía, pues el primer compromiso de un ombudsman debe ser con la causa de las garantías fundamentales.

Especialistas en el tema coincidieron en lo anterior y agregaron que el Senado debe atender las propuestas de la sociedad en torno a la designación.

Miguel Carbonell, del IIJ e integrante del Consejo Consultivo de la CNDH, sostuvo que el próximo titular del organismo debe contar con una visión progresista y defender a las minorías, y que el Senado debe exigir como requisito a quien pretenda llegar a la presidencia de la comisión, contar con una visión progresista en la materia para defender los derechos de migrantes extranjeros, además de que los legisladores cuestionen a los candidatos sobre temas como los homosexuales, el derecho de la mujer a elegir sobre su cuerpo y fuero militar, entre otros.