Mehtar Lam, 2 de septiembre. Más de 23 muertos, entre ellos el segundo jefe de la agencia de inteligencia del país, fue el saldo de un atentado suicida perpetrado cerca de una mezquita en el este de Afganistán, ataque que fue condenado por Naciones Unidas.

Lutfullah Mashal, gobernador de la provincial de Laghman que resulto ileso, dijo que el atacante salió de una tienda y detonó sus explosivos mientras los funcionarios se metían dentro de sus autos fuera de una mezquita en la capital provincial, Mehtar Lam.

El gobernador dijo que entre las víctimas fatales se encontraban dos funcionarios provinciales y el vicejefe de la Dirección Nacional de Seguridad, Abdullah Laghmani. Agregó que unas 36 personas resultaron heridas.

La violencia en Afganistán este año alcanzó su peor nivel desde que los talibanes fueron derrocados al amparo de una ofensiva bélica lanzada por Estados Unidos en represalia al apoyo brindado a Osama Bin Laden y su red Al Qaeda, responsables de los ataques del 11 de septiembre de 2001 contra Nueva York y Washington.

El pasado 20 de agosto se realizaron elecciones, rechazadas por el talibán, en las que el presidente Hamid Karzai aventaja con 47.3 por ciento contra 32.6 por ciento ante su rival más cercano, el ex canciller Abdullah Abdullah, según 60 por ciento del escrutinio.

De mantenerse la cifra, y no superar Karzai el 50 por ciento de los sufragios, habrá que convocar a una segunda vuelta electoral; se espera que en las regiones donde falta contar los votos, éstos favorezcan al mandatario.

La oposición ha denunciado un fraude. Incluso el enviado estadunidense a este país, Richard Hoolbroke, artífice de los acuerdos de paz que ratificaron la desintegración de la ex Yugoslavia en la década pasada, indicó que estas acusaciones deben ser resueltas, aunque consideró que la consulta fue un revés para el talibán.