San José, 2 de septiembre. La selección de Costa Rica completó su equipo para el partido de este sábado ante México, consciente de que un triunfo la dejaría a un paso de clasificar a la Copa del Mundo de Sudáfrica 2010.

La victoria de los costarricenses los pondría en el umbral de la máxima cita del balompié, mientras para el Tri la situación se tornaría comprometedora.

Sabemos que si ganamos estaríamos a un paso del Mundial y eso motiva a cualquiera, dijo el defensa Junior Díaz, del Wisla Cracovia de Polonia.

Los ticos encabezan el hexagonal regional con 12 puntos, seguido por Estados Unidos y Honduras (10 cada uno), México (nueve), y Trinidad y Tobago y El Salvador cinco cada uno. El torneo otorga tres cupos para la justa mundialista y al cuarto la posibilidad de una repesca contra el quinto de Sudamérica.

Los seleccionados ticos han adelantado que esperan conservar la hegemonía sobre sus rivales en el estadio Ricardo Saprissa, donde no han perdido ningún juego en esta eliminatoria.

Honduras, Estados Unidos y El Salvador salieron derrotados del campo del Saprissa, pero México mantiene un invicto de 18 años jugando en Costa Rica en partidos de eliminatoria mundialista.

En el cuartel costarricense reina el optimismo, sobre todo después de que los nueve legionarios se integraron a los entrenamientos y el portero Keylor Navas se reincorporó tras una lesión que sufrió en el partido ante Honduras, el 12 de agosto, en el que Costa Rica perdió 4-0. La única inquietud es un golpe que lesionó al capitán Walter Centeno, pieza vital en el equipo.

En otro tema, se investiga la duplicidad en la venta de entradas. Los falsificadores utilizaron boletos en blanco que salieron de las oficinas de las oficinas de Special Ticket, empresa encargada en parte de la distribución. Este rumor se ratificó el lunes, cuando se confirmó la detención de una funcionaria de esa empresa, informó el diario La Nación.

Se calcula que mil 500 boletos fueron duplicados, lo que ha generado protestas y problemas legales, pero los federativos ya los están cambiando y afirman que no habrá sobrecupo, además de que garantizaron la seguridad de los cerca de mil 400 aficionados mexicanos que estarán en el estadio.