El percance sufrido por el aerotrén del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) la madrugada de ayer, el cual provocó lesiones a tres trabajadores de mantenimiento, fue producto de un error humano, según las primeras investigaciones de la dirección aeroportuaria.

A la 1:30 horas del lunes, el aerotrén impactó al carro de servicio que le daba mantenimiento preventivo, en la curva de salida de la Terminal 1, casi frente al hotel Camino Real. En el momento del choque el aerotrén no transportaba pasajeros, pues su horario de servicio diario es de las 5 a las 23 horas.

Humberto Martínez de la Cruz, Francisco José Casillas Ortega y Juan Carlos Barrientos Vargas son los tres trabajadores de Doppelmayr Cable Car –empresa austriaca que diseñó, construyó y opera el tren– lesionados en el percance. Fueron trasladados al hospital Magdalena de las Salinas para ser valorados y varias horas después fueron dados de alta.

Resultaron sólo con contusiones que no requirieron hospitalización, informó el AICM en un comunicado, donde también señaló que la velocidad del impacto fue de 28 kilómetros por hora y que la máxima que alcanza el transporte ferroviario en operación normal es de 45 kilómetros por hora.

El aerotrén que une a las dos terminales del AICM, en su recorrido de tres kilómetros, ha sido marcado por constantes averías desde su inauguración, el 15 de noviembre de 2007. Desde entonces ha registrado 27 suspensiones en su servicio; el incidente de ayer fue el décimo del año y no hay fecha para restablecerlo, por lo que de momento operan autobuses adicionales que hacen el recorrido entre las dos terminales.