Boston, 29 de agosto. El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, calificó hoy a Edward Kennedy como el legislador más importante de la historia contemporánea y recordó su papel de defensor de los menos privilegiados, en sus palabras finales en el funeral en Boston por el fallecido senador.

La obra de vida de Ted Kennedy no fue defender a aquellos con riquezas, poder o conexiones especiales. Fue la de darle una voz a aquellos que no son escuchados, agregar un peldaño a la escalera de las oportunidades, hacer realidad el sueño de los fundadores de Estados Unidos, sostuvo Obama en su panegírico.

Recibió el regalo del tiempo que no tuvieron sus hermanos, continuó en referencia de los asesinados John y Robert Kennedy, y usó ese regalo para mejorar muchas vidas y enmendar tantos errores como los años le permitieron.

Obama pronunció las palabras finales en el funeral por el león del Senado celebrado en la Basílica de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro en Boston, para culminar así casi tres días de homenajes en la ciudad más ligada a la dinastía Kennedy después de la muerte, el pasado miércoles, del influyente legislador a causa de un cáncer cerebral a los 77 años.

Ante tres ex presidentes –George W. Bush, Bill Clinton y Jimmy Carter–, vicepresidentes, miembros del gobierno y del Senado, entre otros altos cargos políticos y celebridades del país, además del extenso clan Kennedy, Obama recordó su larga carrera de casi 47 años en el Capitolio que, sostuvo, lo convirtieron en el legislador más importante de la historia reciente de Estados Unidos.

Kennedy era producto de una época en la que la alegría y la nobleza de la política impedía que las diferencias de partidos y de filosofía se convirtieran en barreras a la cooperación y el respeto mutuo, de unos tiempos en los que los adversarios seguían respetándose los unos a los otros como patriotas, aseveró.

Sobre los hombros de Ted Kennedy pesaban las más grandes expectativas por quién era, pero él las superó todas al convertirse en lo que fue, agregó en referencia al profundo legado e influencia que la familia Kennedy ha tenido en la historia contemporánea del país, que ahora se pregunta si alguno de los numerosos parientes de esta saga de origen irlandés asentada en Massachusetts podrá asumir el testimonio que dejaron un presidente asesinado, un aspirante a la Casa Blanca también víctima de un homicidio y un senador que contribuyó a hacer realidad algunas de las leyes sociales más importantes del país.