En duelo de deprimidos, este domingo los Pumas esperan dar señales de vida cuando reciban al penúltimo lugar de la tabla general, el Querétaro. En su análisis, Marco Pikolín Palacios aseveró que el equipo auriazul no ha jugado mal, sino que tras ganar el título la veleidosa fortuna dio un giro de 180 grados, así es el futbol, explicó.

Lo cierto es que con renovadas ilusiones el equipo cerró su preparación este sábado, en práctica realizada en la cancha dos de Ciudad Universitaria. El motivo de aliento es la goleada conseguida el jueves en Honduras, fue el mejor sicólogo para levantar la moral y comenzar el borrón y cuenta nueva, sostuvo el zaguero.

Hay que ganar como sea. Las tres unidades deben quedarse en casa recalcó Palacios al concluir el entrenamiento. Es un partido que será bastante duro por las condiciones en que llegan los dos equipos. Estos deben ser nuestros primeros puntos. Uno trata de mentalizarse en eso, dijo.

No obstante, admitió que también será primordial recuperar la confianza, “porque la capacidad tanto defensiva como ofensiva está ahí, el partido previo se jugó bastante bien... Ya es justo que nos regrese la buena fortuna. Pienso que el único encuentro que hemos jugado mal ha sido contra Estudiantes.

Ustedes pueden revisar los videos, hemos perdido por situaciones, desatenciones individuales, pero en general el equipo ha estado bien, simplemente a veces no hubo (suerte), se fue. Luego del título dio un cambio radical, pero estamos muy a tiempo de enderezar la situación, expresó.

La debacle anímica del equipo encontró su bálsamo en la victoria por 5-1 lograda en San Pedro Sula, ante el Real España, en la Liga de Campeones de la Concacaf. Fue acertado que viajara el grupo completo, se jugó bien y sirvió para agarrar confianza, sostuvo.

En su turno, el delantero paraguayo Dante López señaló que intentarán tener una actuación similar ahora ante Gallos Blancos, pues en Honduras fuimos contundentes, metimos goles: era lo que nos estaba faltando. Reconoció que en Pumas siempre existe la presión habitual de un equipo grande.

Existe presión en cada partido, ya tenemos cinco fechas sin ganar y, en efecto, es mayor para nosotros que para Querétaro, pero ellos también tienen una situación difícil en el tema porcentual, explicó.

Admitió que Gallos puede ser un rival más complicado, debido a que llegarán con un técnico interino en el timón (Valtencir Gomes). Ellos van a tratar de entrar al campo con ganas de mostrarse al nuevo técnico, pero nos preocuparemos más por corregir nuestros errores, concluyó.