Ofrece informe sobre presencia del país en la feria del libro de Bogotá
Viernes 28 de agosto de 2009, p. 4
En torno a la literatura mexicana existe, a escala internacional, interés, calidez, una gran curiosidad y cierta empatía
, asegura Laura Emilia Pacheco, directora general de Publicaciones del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes al hacer un balance de la participación de México en la 22 Feria Internacional del Libro de Bogotá.
A pesar de todos los pesares, el país es una potencia cultural
, agrega al dar conocer las cifras con las que la comitiva nacional signó su presencia en tierras colombianas: se vendieron 21 mil 800 ejemplares (de los 35 mil que se llevaron, es decir, poco más de 60 por ciento), los cuales abarcaron 5 mil 957 títulos. Todos los libros infantiles se agotaron. Las ganancias fueron de 292 mil 621 dólares y de los 412 mil visitantes que tuvo el encuentro librero, al menos 90 por ciento visitó el pabellón mexicano.
La poesía fue la carta fuerte de la delegación: les caló muy profundo a los colombianos, hubo un vaso comunicante muy fuerte, no me lo esperaba
, dijo la funcionaria.
Con respecto a la crisis económica que a escala mundial se vive, comentó que ocurrió algo entre misterioso y enaltecedor
, pues los organizadores de la feria tenían sus temores de que el encuentro tal vez no iba a tener público ni ventas: “pero, como ellos nos lo dijeron, la presencia de nuestro pabellón marcó un antes y un después en la historia de la Feria Internacional del Libro de Bogotá, estaban sorprendidos por el interés que se generó.
En efecto, hay una crisis, pero la cultura tiene un poder enorme, pues ésta sirve para acompañar, para pensar, para comunicar, pero también para generar recursos, esta es la prueba. Pero así como hubo entusiasmo por los libros, tambien lo hubo por la presencia de los autores, algunos muy conocidos.
México es el único país que ha sido invitado especial dos veces en la feria colombiana, la primera fue en 1993. En esta ocasión, las actividades que se realizaron en sedes alternas recibieron 12 mil visitantes.
Se realizaron 81 actividades editoriales (con más de 40 autores), 10 exposiciones, 20 espectáculos musicales, seis presentaciones escénicas y 83 actividades infantiles. Este último rubro fue también muy solicitado, al grado que no sólo se impartieron más talleres de los que se tenían planeados sino que, además de los dedicados a los niños, se ofrecieron para adultos.
Gran parte del entusiasmo de los colombianos fue ver un panorama completo de México
, concluyó Pacheco. Como agradecimiento, la comitiva mexicana obsequió el alebrije gigante que exhibió en su pabellón a una biblioteca de Bogotá.
En 2010, México participará en los encuentros libreros de Calcuta y Pekín.