Prevén merma de 10% en cultivos de maíz en Zapopan, Jalisco, debido a la sequía
Sábado 22 de agosto de 2009, p. 30
Los bosques de Nuevo León enfrentan tala clandestina, sequías e incendios forestales, y ahora plagas de escarabajo descortezador e insectos defoliadores afectan más de 6 mil hectáreas de coníferas, informó Santiago Magallanes Torres, gerente regional de la Comisión Nacional Forestal (Conafor).
En entrevista, comentó que se realizaron monitoreos aéreos y recorridos en 300 mil hectáreas de bosques, de las cuales se hallaron 6 mil hectáreas dañadas por escarabajo descortezador, insecto que se aloja entre la corteza y el tronco de árboles, por lo que las hojas adquieren un color rojizo amarillento y se secan paulatinamente si no se les aplican pesticidas.
Estas plagas, señaló Magallanes Torres, atacan cada año, pero se vuelven más agresivas cuando los árboles están debilitados por sequía e incendios, como es el caso. Indicó que en 2007 se atendieron estos problemas en 264 predios y se sanearon 16 mil hectáreas, mientras este año se han apoyado labores de saneamiento en 57 predios, que suman 4 mil 500 hectáreas.
La plaga de escarabajo descortezador se detectó en los bosques de Galeana, Aramberri, Santiago, Zaragoza, Rayones y Montemorelos, pero hay riesgo de que se propague a terrenos forestales aledaños, agregó.
Por su parte, el ambientalista Antonio Hernández Ramírez, del Movimiento Ciudadano en Defensa del Cerro de la Silla, consideró que el surgimiento y agresividad de plagas de este tipo es resultado del calentamiento global, sequía prolongada, deforestación intensiva para construir fraccionamientos, tala clandestina, incendios forestales y lluvia ácida por el desarrollo urbano e industrial.
Esto, enfatizó, debe obligar a las autoridades a tomar conciencia sobre los riesgos que enfrenta la zona metropolitana de Monterrey, al impulsar proyectos como Valle de Reyes y el Arco Vial Sureste, que devastarían grandes áreas forestales de Santa Catarina, Santiago, Monterrey, Guadalupe y Benito Juárez, pues disminuyen drásticamente la capacidad de recarga de los mantos fréaticos que abastecen de agua esta urbe de cuatro millones de habitantes.
Por otra parte, en Jalisco, la ausencia de lluvias podría afectar mil 200 hectáreas de maíz en Zapopan, lo que mermaría 10 por ciento la producción anual del grano en la región, afirmó el director de Fomento Agropecuario del municipio, Raúl Rangel Asencio.
En tanto, un anciano murió en la sierra del municipio de Durango, cuando le cayó un rayo durante un aguacero. La lluvia fue escasa en la entidad durante julio anterior y los primeros días de agosto, pero esta semana ha llovido en 26 de los 39 municipios duranguenses.