El Paso, Tex., 11 de agosto. La política de seguridad fronteriza del actual gobierno de Estados Unidos tendrá carácter multilateral, muy diferente a la aplicada en el pasado, aseguró hoy en esta ciudad la secretaria de Seguridad Interna, Janet Napolitano.

Afirmó que el acercamiento general a la seguridad de la zona es ahora muy diferente, más estratégico, más integral y multilateral, porque tenemos una responsabilidad compartida con México.

Por su parte, el zar fronterizo, Alan Bersin, sostuvo que Estados Unidos está abierto a la posibilidad de ampliar la asistencia que brinda a México para el combate al narcotráfico en el contexto de la Iniciativa Mérida.

Este martes, Napolitano señaló que no podemos segregar la frontera del resto del país ni de nuestros socios en México, al delinear los cambios que el gobierno de Barack Obama realiza para dar seguridad a los 3 mil kilómetros de zona limítrofe entre ambos países.

Durante los ocho años recientes el acercamiento del gobierno federal hacia la frontera suroeste fue tratarla como si fuera algo con lo que había que lidiar, separada de nuestros amplios retos nacionales, pero estas cosas están intrínsecamente ligadas, indicó.

Napolitano fue la principal oradora en el segundo y último día de la Conferencia de Seguridad Fronteriza, que organiza la Universidad de Texas en El Paso con el propósito de discutir los retos que enfrenta la región en esa materia.

La funcionaria estadunidense aseveró que “crear una frontera segura requiere atender varios asuntos al mismo tiempo: inmigración ilegal, tráfico de drogas y violencia.

Estamos librando juntos esta batalla (contra el narcotráfico) y no es sólo un combate conjunto, sino también una oportunidad única con México de desmantelar las organizaciones de narcotraficantes, y sería una vergüenza nuestra si no asumimos el reto, agregó.

Combate al narco, alta prioridad

Aseveró que los cárteles son trasnacionales por naturaleza, por lo que combatirlos es alta prioridad del presidente Obama. Destacó que en la lucha antidrogas Estados Unidos tiene un importante socio en el presidente mexicano Felipe Calderón.

Sostuvo que el gobierno de su país está cooperando más que nunca con México para combatir la violencia que provoca el tráfico de drogas en ambas partes. “Por primera vez, realmente nuestros dos países están tratando este asunto de los cárteles y de la violencia relacionada en la frontera como problema compartido.”

El propósito conjunto, dijo, es frenar el cruce de drogas e inmigrantes ilegales que se dirigen al norte, así como detener el flujo de armas y dinero que va hacia el sur.

Anunció que habrá 30 millones de dólares adicionales para las policías locales, estatales y federales que colaboran en la seguridad fronteriza, que se sumarán a los 45 millones de dólares que ya se tenían asignados para estas corporaciones en el contexto de la Operación Stonegarden.

Ochenta y cinco por ciento de los 30 millones se destinará a las corporaciones locales ubicadas a lo largo de la frontera suroeste, y el resto se entregará a otras que operan en el interior del país y la frontera norte.

El propósito de la Operación Stonegarden es proveer fondos a las policías locales para que puedan reforzar su cooperación con las agencias federales en misiones conjuntas para vigilar la frontera.

La funcionaria se refirió a los cambios realizados en los ocho meses recientes a las políticas migratorias estadunidenses y a otros asuntos de seguridad, como la desaparición del histórico rezago en las solicitudes de ciudadanía, y la emisión de lineamientos para aplicar la ley en los centros de trabajo que contratan indocumentados, enfocándose también en los empleadores.

Agregó que además se inició una reforma para mejorar las condiciones en los centros de detención de inmigrantes y se han enmendado los acuerdos de colaboración con autoridades migratorias y policías locales para enfocarse sólo a la detención de indocumentados que hayan cometido algún delito.

Napolitano, sin embargo, no habló acerca del avance en las negociaciones para una reforma migratoria. Sólo señaló que se lleva a cabo un diálogo en el Congreso y que ella trabajará para generar apoyo a la iniciativa de Obama.

Por su parte, Alan Bersin, entrevistado el lunes por la noche durante la Conferencia sobre Seguridad Fronteriza, aseguró que Estados Unidos está comprometido a mantener y ampliar su colaboración con México para el combate al narcotráfico.

Agregó que la Iniciativa Mérida está funcionando, y sostuvo que Estados Unidos necesita ser paciente y estar listo para ayudar conforme México continúa su lucha contra los cárteles de la droga.

Advirtió que mientras se fortalece en México la capacidad policial, los militares tendrán que seguir colaborando en el combate a las drogas.