Empresarios de la alta oligarquía han hecho de la aviación nacional su botín, lo que adicionado al crecimiento de los sindicatos de protección en el sector, las políticas gubernamentales fallidas y la falta de un plan rector, tienen postrada a esta industria, en la cual las empresas han malentendido que las líneas de bajo costo son también de bajos salarios, denunció el nuevo secretario general de la Asociación Sindical de Pilotos de Aviación (ASPA), Fernando Perfecto Cruz.

Durante la celebración de la 51 asamblea general ordinaria de esta organización, el dirigente rindió protesta en el cargo al frente del nuevo comité ejecutivo que dirigirá el sector, y en este contexto, los pilotos de aviación demandaron al presidente Felipe Calderón instaurar una comisión nacional del transporte aéreo, que revise y analice toda la problemática aeronáutica nacional. Ante ello, el subsecretario de Comunicaciones y Transportes, Humberto Treviño, defendió que están en el error quienes señalan que no hoy una política aeronáutica de Estado.

En la asamblea de ASPA, a la que acudieron los empresarios de Mexicana y Aeroméxico; funcionarios del sector; el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón; dirigentes sindicales de la Unión Nacional de Trabajadores, de Controladores Aéreos y de la Federación Internacional del Transporte; entre otros, el nuevo secretario general del gremio criticó las políticas gubernamentales que se han adoptado para la aviación; la tolerancia que hay hacia los sindicatos blancos y, sobre todo, las prácticas que han tomado las empresas para afectar los salarios y prestaciones de trabajadores.

Expuso que han sido exagerados los embates de los dueños de las aerolíneas contra los trabajadores; que incluso hay empresarios bribones que quieren administrar las aerolíneas como nuevas tiendas de raya, mientras los funcionarios que están de paso toleran o no ven esto y sólo están pendientes de sus intereses particulares.

Dijo que desde el pasado sexenio, prácticamente cada 13 meses desaparece una aerolínea, como fue Aerocalifornia, ALMA, Azteca, A Volar, TAESA, y ahora está en este proceso Aviacsa.

También planteó que no hay una política de Estado en materia aeronáutica, y cunde el desempleo en el sector y la zozobra entre los trabajadores, por lo que llamó a conformar un frente de organizaciones como una barrera de resistencia frente a los empresarios que han hecho de la aviación su botín. Se trata, dijo, de integrar una comisión que reúna a todos los actores de la aviación para revisar tarifas, impuestos, competencia y el conjunto de problemas para sacar adelante a esta industria.

Está en juego una de las actividades económicas primordiales del país, planteó, y se comprometió a defender la contratación colectiva, a no permitir que en aras de la crisis se sobrecarguen los esquemas de trabajo de los pilotos, porque en este sector un piloto mal pagado y fatigado es sinónimo de riesgo. En este encuentro, el secretario del Trabajo, Javier Lozano, entregó la toma de nota a Fernando Perfecto, cuando apenas habían transcurrido unos minutos de su protesta, mientras se daban reconocimientos a pilotos con 5 mil, 10 mil, 15 mil y 20 mil horas de vuelo, como Emilio Barrera, Salvador María Lizana, Jesús Armando Ortega y Arturo Zúñiga, entre otros.