Concierto Ciudad de México, lleno de vida
Martes 4 de agosto de 2009, p. 9
Llevaban horas esperando este momento, cuando al fin anunciaron a los reggaetoneros Wisin & Yandel, y una voz anticipó, estruendosa: hoy serás parte de la revolución
; ensordecedores gritos femeninos inundaron la avenida Reforma. Así, frente al Ángel de la Independencia, el concierto Ciudad de México, llena de vida, organizado para incentivar el turismo, culminó en una descarga de adrenalina, testosterona y decibeles con los reggaetoneros de moda.
Una joven en primera fila lloraba mientras veía a sus ídolos puertorriqueños, quienes se contoneaban al ritmo de canciones con letras como “quítate el dolor, ponte el babydoll” o mami, dame lo que quiero
.
Los organizadores, el Gobierno del Distrito Federal y empresas patrocinadoras, eligieron que el platillo culminante de la jornada musical fuera un éxito comercial dirigido a personas que no pasaban de los 30 años, en muchos casos ni de los 20.
A veces, los artistas con éxito olvidamos a los verdaderos protagonistas. Venimos a darles las gracias
, dijeron los puertorriqueños, quienes estarán en el Palacio de los Deportes el 9 de agosto.
Hip hop de Calle 13
En contraste, en la larga lista de músicos que se presentaron, también estuvieron los puertorriqueños de Calle 13, quienes hacen un hip hop inteligente, sobre la vida en el barrio, combinado con ritmos latinos y afro.
Antes de Wisin & Yandel, los asistentes, que según Protección Civil llegaron a ser 165 mil, escucharon con más respeto que emoción La bilirrubina, de Juan Luis Guerra. El artista dominicano, principal exponente de la bachata y el merengue, recibió un aplauso generoso, pero –al menos en las secciones más cercanas al escenario– pocos bailaron.
Es un placer tocar para este hermoso país
, dijo Guerra. Declaro que esta crisis pasará pronto.
Siguió el turno de la canadiense Nelly Furtado: Te quiero también, México. Te quiero tanto que esta canción es en español
, anunció la popera con bastantes seguidores en el público.
A decir verdad, el amor de Furtado hacia México tenía poco que ver con el hecho de cantar en nuestro idioma. Más bien se relaciona con que su disco más reciente, Mi plan, está en español.
Como cada artista podía cantar sólo de tres a cinco canciones, casi todos aprovechaban para interpretar las más populares y alguna que quisieran promocionar. Furtado cantó I’m Like a Bird, Turn Out the Light y una incluida en Mi plan, entre otras.
Al entregarle el reconocimiento por su participación en el concierto, le preguntaron si quería dar un mensaje. La cantante negó con la cabeza, lo pensó un segundo y dijo un escueto: “I love you, te amo”.
En cambio, conforme avanzaba la jornada, los comentarios de los presentadores fueron subiendo de nivel: Toma chango tu banano
o de plano se volvieron, digamos, igualados: Hay que agradecer al carnal Marcelo
o, según ellos, hablaron como el pópolo: “El aplauso más chidongongo de toda la bandera”.
Y en ese caso tuvieron razón: el aplauso más chidongongo de toda la bandera fue para los reggaetoneros Wisin & Yandel.