Senadores de los partidos Acción Nacional (PAN) y de la Revolución Democrática (PRD) exigieron a la Procuraduría General de la República (PGR) que investigue hasta las últimas consecuencias el robo de combustibles a Petróleos Mexicanos (Pemex), porque es grave la posible existencia de una red de corrupción de servidores públicos vinculada a la sustracción de hidrocarburos.

El secretario de la Comisión de Energía del Senado, el panista Rubén Camarillo, consideró que el robo de combustibles constituye una de las pérdidas patrimoniales más importantes de la paraestatal; es algo que se sabía, no de ahora sino de hace mucho tiempo, pero siempre se había ligado con la delincuencia organizada, no con personal de Pemex.

Acerca de la información dada a conocer el miércoles pasado sobre el involucramiento de personal de Pemex en el robo de combustibles en la cuenca de Burgos, Camarillo advirtió que si existen evidencias o indicios de que estos robos se han perpetrado con la colaboración o el disimulo de trabajadores de la paraestatal, que se han hecho de la vista gorda, la PGR debe castigarlos con todo el rigor de la ley.

Por otra parte, el coordinador de los senadores del PRD, Carlos Navarrete, expresó que espera que la investigación llegue hasta el fondo, porque no me sorprendería que los ladrones de gasolina y gas, los ordeñadores de ductos en el país, se hayan coludido con funcionarios de Pemex para, dentro de la paraestatal, tener información y cómplices.

Navarrete insistió en que la PGR debe investigar y fincar responsabilidades.

En tanto, el senador Camarillo recalcó que la PGR está obligada a actuar, caiga quien caiga, porque esa sangría millonaria no puede continuar, sobre todo ahora que Pemex enfrenta una situación financiera muy delicada y no puede resistir más fugas de recursos.

Pemex es una empresa de todos los mexicanos y hay que acabar con esos robos; y si hay contubernio o colaboración de trabajadores, deben castigarlos con todo el rigor de la ley.