El repunte de la influenza A/H1N1 en el sureste del país empezó desde el 1º de junio y ha sido de tal magnitud la propagación de la enfermedad, que Chiapas rebasó al Distrito Federal en cuanto al número de afectados y ahora ocupa el primer sitio con 2 mil 205, contra dos mil 151 que se han reportado en la capital del país. Información de la Secretaría de Salud (Ssa) señala que Yucatán está en tercer lugar con mil 681 casos.

Hasta ahora, la epidemia ha dejado un saldo de 15 personas fallecidas en Chiapas y 8 en Yucatán, luego de que desde finales de mayo no se habían reportado decesos en el país.

Tabasco ocupa el cuarto sitio con 720 enfermos; le siguen Veracruz (712), Jalisco (680) y Guerrero (604). Detrás de estos se encuentra San Luis Potosí con 499 y en el onceavo sitio el estado de México con 383.

A nivel nacional se tienen confirmados 13 mil 646 casos de la nueva gripe y 125 defunciones, lo que ha demandado una inversión de mil 700 millones de pesos, indicó el secretario de Salud, José Ángel Córdova Villalobos durante una gira de trabajo en la que supervisó las acciones sanitarias que se llevan a cabo en Chiapas.

Recordó que a esta entidad se trasladó personal del Instituto de Diagnóstico y Referencia Epidemiológica (Indre), neumólogos y unidades móviles de salud, para apoyar a los servicios estatales de salud. Mientras Córdova visitaba el Hospital Pediátrico de Alta Especialidad, una niña de 4 años perdió la vida a causa de la influenza A/H1N1.

De los datos oficiales resalta que en sólo 15 días se agregaron tres mil nuevos casos al registro nacional, la mayoría concentrados en el sureste de la República.

Aunque la Ssa indica que la intensificación de la influenza debe ser una llamada de atención de que el virus sigue presente y está circulando por todo el territorio nacional, especialistas consultados advirtieron sobre las interrogantes que todavía existen en torno al virus A/H1N1, como su capacidad de sobrevivencia en temperaturas tan altas como las que se registran en Chiapas y Yucatán, cuando en un principio se había planteado que su transmisión era viable en el invierno, con temperaturas bajas.

Alertaron sobre la importancia de que el gobierno federal invierta, verdaderamente, en la contratación de personal médico, compra de equipos de ventilación e insumos necesarios para enfrentar la segunda ola de la pandemia, que se prevé llegará en los últimos meses del año. Lo anterior, porque a pesar de los anuncios oficiales, en las entidades del sureste se han enfrentado carencias en recursos humanos e infraestructura.

Incluso, mencionaron deficiencias como que no en todos los casos se toman las muestras de exudado faringeo o nasal, para confirmar que se trata de casos de influenza A/H1N1. En otros casos, la prueba se realiza tardíamente, a veces después de que el paciente ha iniciado el tratamiento antiviral.

Subrayaron la necesidad de que se corrijan las deficiencias y se subsanen las carencias, toda vez que de acuerdo con las estimaciones de los expertos y lo que se ha empezado a ver en el hemisferio sur, donde están iniciando su temporada invernal, es muy probable que para la próxima ola de la pandemia en el hemisferio norte, aumente sustancialmente el número de enfermos con respecto a lo que se reportó entre abril y mayo.

En tanto, la Ssa informó que la propagación del nuevo virus de influenza se mantiene en las localidades urbanas. En el caso de Chiapas, en Tuxtla Gutiérrez, Tapachula y San Cristóbal de las Casas. La dependencia también reconoció que los individuos que viven en condiciones de pobreza son más vulnerables a contraer el padecimiento.

De acuerdo con la información proporcionada por la Ssa, el pico del repunte de la infección viral se ubica el 21 de junio, cuando 271 personas iniciaron con síntomas de la nueva gripe. Durante la emergencia sanitaria en el centro de la República el pico se ubicó el 27 de abril con 407 nuevos enfermos, pero debido a las medidas de distanciamiento social adoptadas como la suspensión de actividades escolares y el cierre de lugares de entretenimiento en el Distrito Federal, la transmisión empezó a bajar rápidamente.

En cambio, desde el 1º de junio el registro diario de nuevos casos en la zona sur, pasó de alrededor de 70 a un promedio de 160 y llegó hasta 271, en una tendencia que se mantuvo constante durante el mes pasado.

Al desglosar los datos nacionales, la Ssa reportó que más de la mitad de los casos confirmados corresponden a personas de recién nacidos a 19 años de edad, mientras que 70.4 por ciento de los fallecidos tenían entre 20 y 54 años de edad. Más de la mitad eran mujeres.

Con información de Ángeles Mariscal y Mauricio Ferrer, corresponsales