Se presentarán cuatro funciones de Don Pasquale en la sala Miguel Covarrubias
El coordinador de Difusión Cultural asegura que la universidad carece de recursos para realizar ese tipo de propuestas
No se atenta contra los principios
de la casa de estudios, ataja
Jueves 16 de julio de 2009, p. 5
La puesta en escena de Don Pasquale, de Gaetano Donizetti, marca el comienzo de un convenio entre la Coordinación de Difusión Cultural de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y la asociación civil Pro Ópera para producir de manera conjunta por lo menos un título operístico por año, según anunciaron ayer representantes de ambas instancias.
Esta conjunción de recursos y esfuerzos con organismos públicos y privados forma parte de la política emprendida por el titular de ese área universitaria, el escritor Sealtiel Alatriste, para hacer frente a propuestas que de otra manera serían irrealizables
, ante la estrechez económica a la que está sujeta, según afirmó el funcionario.
Habría que ser conscientes de que es imposible pedirle al presupuesto universitario que sufrague todos los gastos que hace en difusión cultural, y tenemos que buscar muchas maneras para asociarnos, como en este caso con Pro Ópera
, indicó.
“Casi sería impensable que pudiéramos hacerlo nosotros solos –dijo refiriéndose al caso específico de Don Pasquale–. No tenemos los recursos. Entonces, (bienvenidas) las asociaciones que nos permiten colaborar y tener en nuestros teatros una actividad de este nivel.
“Las instituciones de cultura y las asociaciones civiles –prosiguió Alatriste– no competimos unas con otras en un país como México, tan necesitado de difusión cultural y actos culturales; lo que debemos hacer es colaborar abiertamente.”
Elenco de jóvenes cantantes
Durante la conferencia de prensa en la cual se anunciaron los pormenores de Don Pasquale –de cuya dirección escénica se encargará José Antonio Morales, mientras Rodrigo Macías lo hará de la musical–, Sealtiel Alatriste precisó que para convenios como el sostenido con Pro Ópera no hay demasiadas reglas fuera de la colaboración de respetar los descuentos habituales a los estudiantes y los maestros
.
Para el caso de esa ópera, La Jornada hizo ver al funcionario universitario que la primera de las cuatro funciones que tendrán lugar entre el 25 de julio y el 2 de agosto, en la sala Miguel Covarrubias del Centro Cultural Universitario, cuenta con la particularidad de que el primer piso del recinto estará reservado exclusivamente para el público de Pro Ópera, además del alto precio de los boletos de esa sección (mil pesos) y de que el pago de esa entrada incluye una cena, previa reservación.
Se le enfatizó que ésa es una situación poco habitual en los recintos de la UNAM, que incluso podría ser tomada como un acto privado o semiprivado, y se le preguntó si ello no atentaría contra los principios de esa casa de estudios.
No atenta contra los principios de la universidad ni nada; eso es una tontería
, respondió. Ésta es una cena privada. Se paga lo que cuesta el boleto y aparte la cena; no es una cena pública; es una cosa privada, como cuando alguien viene y nos renta el Museo Universitario de Arte Contemporáneo para hacer una cena, porque la universidad debe obtener recursos para poderse financiar. Entonces, rentamos la Casa del Lago, el centro Tlatelolco; tenemos una fundación que hace estas cosas.
Según Sealtiel Alatriste, es una política libre y necesaria que en este país todos colaboremos con la difusión cultural. Cuando se piensa que a partir de esto estamos ganando, es más bien un prejuicio y algo fuera de toda proporción; ¡ojalá pudiéramos tener una recuperación!
Por parte de Pro Ópera, uno de sus vocales, Luis Gutiérrez, tras afirmar que la ópera nunca ha sido negocio en ninguna parte del mundo, sostuvo que si acaso alguna aspiración tuvieran en lo económico es salir tablas
, es decir, recuperar lo invertido.
Informó que fueron 2 millones de pesos los que se invirtieron en ese montaje, el cual será protagonizado por un elenco de jóvenes cantantes mexicanos: la soprano Rebeca Olvera, el tenor Javier Camarena y el barítono Josué Cerón, además del bajo Charles Oppenheim, quien se desempeña asimismo como editor de la revista Pro Ópera.
Las funciones de esta obra, que contará en la parte musical con la actuación del Ensamble Filarmonía y el coro de la Escuela Nacional de Música de la UNAM, serán 25 y 26 de julio, y 1º y 2 de agosto, todas a las 18 horas.