La Secretaría del Medio Ambiente informó que como parte del inicio de actividades de la policía ambiental, los pasados días 8 y 9 de julio, con la participación de más de 60 elementos y 12 vehículos, retiró material de construcción en los poblados de San Nicolás Totolapan y Santo Tomás, ubicados en la carretera Picacho Ajusco, acción por medio de la cual se liberó un predio de dos mil 500 metros cuadrados.

La dependencia agregó que el retiro de material de construcción y la clausura de obras que violaban la Ley Ambiental del Distrito Federal, son algunos de los resultados de los primeros operativos que la policía ambiental realizó en la delegación Tlalpan, como parte de las acciones encaminadas a la protección del suelo de conservación y el equilibrio ecológico de la ciudad.

Precisó que como parte de estas acciones se iniciaron tres procedimientos administrativos en San Nicolás Totolapan y la comunidad Ajusco por cambio de uso de suelo, depósito de residuos de construcción y extracción de recursos pétreos.

Indicó que también se realizó un recorrido por el paraje Las Cruces para obtener coordenadas de las diferentes construcciones. Además se clausuraron una construcción en Santo Tomas Ajusco, una barda en el ANP Parque Ecológico de la Ciudad de México y 18 obras en el paraje La Primavera, dentro de ese parque.

La dependencia recordó que el Distrito Federal está formado por suelo urbano y suelo de conservación, este último con una superficie que abarca 59 por ciento de su territorio, que es de vital importancia para el equilibrio ambiental de la zona metropolitana del valle de México y constituye un territorio estratégico para la vida de los habitantes de la ciudad de México.

Las principales tareas que realiza la policía ambiental se orientan a evitar el establecimiento de nuevos asentamientos humanos y la extensión de los ya existentes; evitar la tala clandestina, el vertimiento de residuos de la construcción y la extracción de suelo y materiales pétreos, indicó.