Congresistas de Canadá, Estados Unidos y Perú, entre otros países, así como líderes sindicales de la Federación Internacional de Trabajadores de la Industria Metalúrgica (FITIM), y de otras organizaciones laborales, se reunieron ayer con legisladores mexicanos, para tratar la situación del sindicato minero y demandaron que cese la persecución contra este gremio, castigo para los asesinos de trabajadoress fallecidos en el conflicto, justicia para las viudas de Pasta de Conchos, que se descongelen los fondos de esta organización y se deje en libertad a Juan Linares Montúfar.

Jack Layton, miembro del parlamento de Canadá (líder del partido Neodemócrata, la tercera fuerza política de ese país), se reunió con el secretario del Trabajo, Javier Lozano Alarcón, quien le aseguró que en este conflicto la dependencia ha acatado las resoluciones del Poder Judicial, y agregó que no se le dio la toma de nota al líder del gremio, Napoleón Gómez Urrutia, por improcedente, porque no se cumplía con la Ley Federal del Trabajo ni con los estatutos del sindicato.

Los representantes internacionales, tanto en la reunión con los legisladores como con el secretario del Trabajo, insistieron en que es tiempo de resolver este problema, que ya cumplió tres años, lo que ha afectado gravemente a los trabajadores y sus familias, e incluso ha costado la vida a varios de ellos.

En el encuentro, Jyrki Raina, presidente de la FITIM, dijo que hay preocupación a escala internacional porque el gobierno mexicano, que proclama estar luchando por el cumplimiento de la ley, practica la impunidad cuando se trata de los derechos de los trabajadores. Sostuvo que esta federación mantendrá su apoyo a los mineros mexicanos.

Manfred Guarda, presidente de la Federación Internacional de Sindicatos de Trabajadores de Industrias Químicas, de Energía y Minas, señaló que es una vergüenza que un líder sindical se vea obligado a dirigir su gremio desde el extranjero y pidió la liberación de Juan Linares Montúfar, quien permanece en la cárcel desde finales del año pasado.

De la Central Nacional de la Mujer Minera del Perú, María Surime acusó que el neoliberalismo aplasta a los pueblos, sobre todo a indígenas y trabajadores que luchan.

Rosario Ibarra, por su parte, apuntó que en lo que va de este sexenio han desaparecido casi 100 trabajadores petroleros relacionados con luchas obreras, además de que se ha masacrado a mineros y no se ha hecho justicia a sus viudas.

El secretario del Trabajo, en su reunión con Jack Layton, expuso que existen tres órdenes de aprehensión vigentes contra Gómez Urrutia, emitidas por tres jueces distintos, una de ellas federal, y con base en ésta se presentó la solicitud de extradición del dirigente al gobierno de Canadá.

Lozano Alarcón acusó que el sindicato minero ha condicionado el levantamiento de las huelgas a que se retiren los cargos penales contra Napoleón Gómez Urrutia.