La crisis económica ya tuvo impacto al reducir el crecimiento de las universidades particulares. En el último ciclo escolar, el aumento de su matrícula fue tan sólo de 35 mil alumnos, el índice más bajo en los últimos años, mientras que, en este escenario, se advierte una posible desaceleración de la demanda en las instituciones de carácter público, expresó el subsecretario de Educación Superior, Rodolfo Tuirán.

El funcionario advirtió que en el corto plazo podría registrarse el siguiente panorama: el desplazamiento de los estudiantes de las universidades particulares de elite a las de costo intermedio o bajo, así como la transferencia de alumnos de las escuelas de paga a las públicas, o bien, una deserción estudiantil de los centros privados sin buscar ingreso en las públicas.

En entrevista, reconoció que los tres escenarios son preocupantes, porque por el lado de la demanda podríamos experimentar una desaceleración que nos impida crecer con el mismo vigor con el que lo hemos hecho en los últimos tres años.

En el pasado ciclo escolar, apuntó, la oferta pública registró el mayor crecimiento tenido en los últimos 19 años, con excepción del alcanzado en 1997, cuando se incrementó en 150 mil alumnos la matrícula de las universidades públicas.

Ahora, precisó, el aumento fue de 115 mil alumnos, de los cuales entre 80 mil y 85 mil asisten a instituciones de carácter público y 35 mil a escuelas de paga. Esto significa que las privadas tuvieron el crecimiento más bajo en varios años.

“Lo anterior es sui generis, porque hace mucho tiempo que no se observaba que la oferta pública estuviera por encima de la oferta particular, lo cual ya se empezó a sentir en el último ciclo escolar”, afirmó.

Aunque indicó que la demanda de las instituciones públicas también podría desacelerarse, señaló que no estarían en riesgo las metas que se ha propuesto la Secretaría de Educación Pública (SEP) en este aspecto, porque si bien la crisis ha golpeado de manera significativa a los hogares, también es cierto que muy probablemente lo que ocurra es una pronta y rápida recuperación, lo cual puede contrarrestar la caída de los dos primeros trimestres.

Enfatizó que ha estado en contacto con las instituciones privadas agrupadas en la Federación de Instituciones Mexicanas Particulares de Educación Superior, las cuales se comprometieron a realizar un esfuerzo significativo de retención de estudiantes por medio del incremento moderado o el no incremento en la colegiatura y la inscripción, así como diferir pagos e incrementar becas.

Al señalarle que pese al impacto registrado, los centros privados no han aceptado reducir el monto de sus colegiaturas, dijo que las respuestas son disímiles; algunos han ofrecido directamente mantener los precios, muy pocos han intentado subir exclusivamente según el índice de precios, y desde mi punto de vista es una buena noticia en el sentido de que no ha habido una respuesta de crecimiento acelerado de las colegiaturas, porque están preocupados evidentemente de que esta situación pueda afectar a las universidades particulares de manera significativa.