El Rosario, Sin., 7 de julio. La jornalera migrante Celia Castillo, de 51 años, y su sobrino Amelio Zeledón Díaz, de 12 años, originarios de Durango, murieron al derrumbarse el techo de la vieja casona en que se albergaban, informó el edil César Ramírez Patiño, quien lamentó las condiciones en que vivían trabajadores del campo que llegaron hace varios meses al poblado Apoderado, unos 15 kilómetros de la cabecera municipal.

El niño falleció por traumatismo craneoencefálico, cuando le cayó encima una viga, y Celia murió por asfixia, según el reporte del médico legista Jesús Enrique Castro López.

En el accidente, ocurrido la madrugada del lunes, resultaron lesionados el niño José Alberto Zeledón Díaz, hermano de Amelio; la madre de ambos, Celia Díaz Ríos, de 38 años de edad, así como el esposo y padre de los citados, Gabriel Zeledón Aniceto, de 46 años, quienes fueron trasladados al Hospital General de Escuinapa.

El alcalde de Rosario comentó que en el municipio no hay un sitio oficial para albergar cada temporada a los miles de jornaleros que llegan a los diferentes campos de la demarcación, donde hay unas 10 mil hectáreas de sembradíos de mango, para los cuales se contrata personal de otras entidades. Añadió que por la condición migrante de los jornaleros su administración podría aportar apoyos para trasladarlos a sus lugares de origen.