Los priístas José Calzada Rovirosa, en Querétaro, y Fernando Toranzo Fernández, en San Luis Potosí, dieron la sorpresa este domingo al arrebatar al Partido Acción Nacional (PAN) las gubernaturas de ambas entidades, después de 12 años en el primer caso, y de seis en el segundo.

Calzada Rovirosa, de la coalición Juntos para Creer (PRI-Partido Nueva Alianza), aventajaba con 284 mil 844 votos a su oponente panista Manuel González Valle, quien tenía 256 mil 655 votos con 90.37 de las actas computadas. Con ello terminarían en Querétaro 12 años del dominio panista que inició en 1997 Ignacio Loyola Vera y continuó en 2003 Francisco Garrido Patrón. La participación ciudadana fue de 57 por ciento.

De acuerdo con el Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) de San Luis Potosí, Toranzo Fernández llevaba 926 mil 967 votos contra 570 mil 842 del panista Alejandro Zapata Perogordo, con 70.82 por ciento de las casillas computadas. Así, la gubernatura regresaría a manos priístas luego del sexenio de Marcelo de los Santos Fraga, quien ganó a Luis García Julián en 2003.

De las seis gubernaturas que se disputaron ayer el PRI se perfilaba como triunfador en cinco; en Sonora –pasada la medianoche y con una diferencia de dos horas respecto del Distrito Federal–, su candidato, Alfonso Serrano Elías, tenía 195 mil 596 votos contra 219 mil 459 del panista Guillermo Padrés Elías, con 50.86 por ciento del cómputo.

En Nuevo León, al computarse 97.26 por ciento de las casillas, el priísta Rodrigo Medina de la Cruz llevaba 790 mil 635 votos contra 707 mil 603 597 del panista Fernando Elizondo Barragán, y la perredista Martha Zamarripa Rivas, 45 mil 976.

Elizondo Barragán dijo que a escala nacional su partido obtuvo resultados que no acabamos de entender bien. Dirigiéndose a militantes que intentaban sobreponerse a la decepción, agregó: No los quiero tener aquí colgados de una esperanza. Si la captura de la información es correcta, está bastante claro que esta elección no la ganamos...

El senador con licencia y ex gobernador interino rehusó dar una lectura autocrítica a la derrota de su partido, e insistió: No renuncio a nada, no reconozco nada, pero si estas cifras son correctas será difícil que puedan revertirse.

El PRI también conservaría la gubernatura de Colima. Con 39.23 por ciento de las casillas, Mario Anguiano Moreno acumulaba 47 mil 725 votos contra 42 mil 762 de la panista Martha Leticia Sosa Govea.

En Campeche, con 59.2 por ciento de avance en el cómputo, el priísta Fernando Eutimio Ortega Bernés llevaba 102 mil 916 sufragios contra 82 mil 907 de su contrincante panista, Mario Alberto Ávila Lizárraga.

En el estado de México, el PRI aplastó a sus contrincantes. De acuerdo con la dirigencia estatal del tricolor, tiene ventajas irreversibles en los municipios más importantes de la entidad, entre ellos Ecatepec, Nezahualcóyotl, Chalco, Valle de Chalco e Ixtapaluca, así como Tlanepantla, Naucalpan, Toluca y Metepec, que estaban en manos de la oposición.

Además, el PRI llevaba la delantera en 39 de los 45 distritos locales, tendencia que le aseguraría la mayoría absoluta de la próxima legislatura estatal.

Por la noche, las dirigencias de los partidos de la Revolución Democrática y Acción Nacional en el estado no desmintieron estos resultados, pero señalaron que el Revolucionario Institucional ganó con el uso indiscriminado de recursos públicos.

Se trató de una elección de Estado, coincidieron por separado el dirigente perredista, Luis Sánchez, y el panista Ulises Ramírez. Ambos dijeron tener pruebas suficientes para demostrar la ilegalidad de los comicios y adelantaron que acudirán a los tribunales para limpiar la elección y revertir estos resultados.

Sánchez calificó esta elección de atentado a la democracia y acusó al gobierno estatal de apoyar cínicamente a los candidatos del PRI con la complacencia de las autoridades electorales.

Adiós al corredor azul en Edomex

A las siete de la noche, el dirigente estatal del PRI, Ricardo Aguilar, anunció que su partido esperaría las cifras finales del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) del Instituto Electoral del Estado de México (IEEM), pero hora y media después. acompañado de algunos candidatos del tricolor, declaró vencedor al PRI.

Aguilar presumió victorias en la capital del estado, que desde hace nueve años estaba en manos del PAN. Las cifras de los priístas señalaban una diferencia de más de 16 mil votos. Añadió que es un hecho que su partido recuperaría bastiones panistas como Naucalpan, Tlalnepantla y Cuautitlán Izcalli, gobernados por Acción Nacional desde 1996 y que formaban parte del llamado corredor azul.

Dijo que al PRD le arrebataron Ecatepec, el municipio más poblado del país; Chalco, Valle de Chalco y Texcoco. En Nezahualcoyotl llevamos una ventaja que consideramos irreversible.

Aguilar también se ufanó del triunfo en Metepec, la demarcación con los índices más elevados de bienestar social en la entidad, que era gobernado por el Partido del Trabajo, aunque algunos priístas consideraron que los resultados en este municipio son muy estrechos entre los tres principales candidatos. Los triunfos se extendieron a Chimalhuacán, Ixtapaluca, Huixquilucan, Atlacomulco y Coacalco.

De confirmarse la victoria del PRI en todos estos municipios, el tricolor gobernará a más de 70 por ciento de la población en la entidad. El PRI se quedó con las 10 demarcaciones más pobladas, menos Atizapán de Zaragoza, que permanecerá en poder de Acción Nacional.