A los más de 800 empleados de limpia del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) no sólo les adeudan salarios y finiquitos tras la salida de la compañía Excelgast, que hasta el pasado 15 de junio prestó sus servicios en la terminal aérea, sino que ahora, al ser contratados por Fejastec, otra empresa outsourcing, enfrentan la ampliación de su horario de trabajo y la modificación de sus condiciones laborales.

Incluso se han quedado sin seguridad social, debido al conflicto judicial que mantiene el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) con Excelgast por incumplimiento de pagos y entrega de reportes de cuotas.

Todos los días, luego de la salida de Excelgast, se han presentado denuncias de trabajadores, a quienes en sus respectivas clínicas les aseguran que han sido dados de baja, sin que se les preste servicio médico. Aunque verbalmente ya fueron contratados por la nueva empresa y, eventualmente, están por cobrar su primera quincena, la mayoría no han firmado el contrato prometido por la nueva compañía. Hasta ahora sólo han signado un papel en blanco, en el cual únicamente aparecen su nombre y el salario que percibirán.

Juan José Reyes, representante de los trabajadores, reiteró la denuncia por la negativa del IMSS a seguir proporcionando el servicio médico. Incluso calificó de ilegal dicha acción, porque la mayoría fueron recontratados por Fejastec, por lo cual podrían recurrir a un paro para exigir, por principio de cuentas, seguridad social.

Autoridades del AICM han recibido notificaciones del IMSS y de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCA) para retener todos los pagos a Excelgast, debido, en el primer caso, al adeudo de cuotas, y en el segundo, para garantizar el laudo en favor de unos 40 empleados contra la empresa en Zihuatanejo. Esta situación ha hecho que Excelgast no cubra sus deudas con los empleados de la terminal aérea.

Para dar por terminada la relación entre la compañía y el aeropuerto falta que se expidan tres cheques, pero autoridades del AICM han pedido al IMSS y a la JLCA ponerse de acuerdo para entregar el dinero pendiente.

Mientras tanto, personal de limpieza que labora en oficinas, pasillos, ambulatorios y salas de última espera, entre otros sectores, se queja de que la nueva empresa ha anunciado varios cambios, entre ellos la ampliación de su jornada de trabajo y descuento de tres días y castigo adicional a los trabajadores que no asistan a laborar.

Los casi 800 empleados, muchos de ellos adultos mayores y de escasos recursos, ganan en promedio mil 300 pesos quincenales y cumplen tres turnos hasta de nueve horas, si se toma en cuenta el horario de comida. Además les aplican descuentos hasta por 200 pesos en caso de inasistencia y no reciben aguinaldo ni utilidades. Sólo les dan las prestaciones de ley.

El representante de los trabajadores responsabilizó a las autoridades del IMSS de que no se liberen las cuentas de la empresa, aun cuando Excelgast tendría unos 18 millones de pesos, recursos suficientes para cubrir nóminas, pagos por prestaciones y finiquitos a personal que ya no labora para la compañía. Además, para garantizar el laudo en favor de los trabajadores en Zihuatanejo y también las cuotas que adeuda al Seguro Social.