El rey con su melenota camina sobre la alfombra roja. Es el león y su rugido es música. Camina pavoneándose con su capa roja adornada de teclas de piano. Los demás animales lo miran de lejitos; todos, de arriba a abajo, guardan una cordial distancia, no sea que en una de esas...

Y con el león la sala Silvestre Revueltas comienza a llenarse de toda especie animal, de selva o de granja: gallinas con cuerpecito de violín, elefantes con panza de contrabajo bailando elegantemente un romántico ballet, burros salvajes, canguros patones, varios peces-piano, un ruiseñor, un sapo, cuatro tortugas que bailan can can mejor que en el Moulin Rouge, un pájaro cucú, cinco conejos de colita esponjada, un ruiseñor en una jaula de oro. Y sus sonidos se convierten en música. En música de concierto.

Coctel de fragmentos

Se trata de El carnaval de los animales y otros animales: gran fantasía zoológica y otras historias que se presenta este fin de semana en la sala Revueltas del Centro Cultural Ollin Yoliztli, en un programa con música de Serguei Prokofiev, Camille Saint-Saëns, Igor Stravinsky, Wolfgang Amadeus Mozart, Silvestre Revueltas, Maurice Ravel, Gioacchino Rossini y Federico Ibarra, a cargo de la Orquesta Filarmónica de la Ciudad de México (OFCM), con Rodrigo Macías como director huésped.

La puesta en escena es de César Piña y en ella participan unas 20 personas, entre titiriteros, bailarines, narradoras (que son dos y vestidas con algo parecido a trajes futuristas), además de la soprano Guadalupe Jiménez y el tenor Ricardo López, que en una de esas se convierten en dos pollotes en el dueto Papageno y Papagena, con un plumaje de color excéntrico.

Un despliegue de zoología fantástica con una meta entre las plumas y la pelambre: acercar a los niños a la música de concierto y para ello recurren a los elementos visuales que atraen y, mientras los niños se divierten, descubren los sonidos de los animales en las notas musicales, y de ahí el hilo los lleva a títulos de obras como El carnaval de los animales, El ruiseñor, El renacuajo paseador; La flauta mágica, El niño y los sortilegios o Alicia.

“Vamos a escuchar y vamos a ver un coctel de fragmentos de diversos autores y épocas, con diversos grupos instrumentales, con El carnaval de los animales, de Camile Saint-Saëns como columna del espectáculo”, dijo a La Jornada el director Rodrigo Macías.

Está muy claro que los niños pueden acercarse a la música por sí misma, porque les llama mucho la atención, pero si hay elementos o historias que los involucren, que los hagan asociar estas ideas a la música es mejor. Este espectáculo es rico en esto, añadió.

“Es muy interesante que podamos trabajar con una orquesta sinfónica en vivo, en este caso la filarmónica, para hacer un espectáculo para niños, que tiene el objetivo de introducirlos a ellos y a todo el público, a la música mediante las imágenes y, sobre todo, por obras que se escribieron para ello, como El carnaval de los animales”, dijo a su vez César Piña, quien también es el responsable del diseño de producción y el concepto.

El carnaval de los animales y otros animales… se presenta este sábado a las 18 horas y el domingo a las 12:30 horas en la sala Silvestre Revueltas, en el Centro Cultural Ollin Yoliztli (Periférico Sur 5141, colonia Isidro Fabela).

El precio es de 200 pesos con los descuentos tradicionales a estudiantes, maestros y adultos mayores con credencial.