Ultrarradicales
buscan nuevas razones para sembrar el caos, asegura premier saliente
En Canchis y Apurímac las protestas se iniciaron en apoyo a indígenas; adquirieron agenda propia
Martes 23 de junio de 2009, p. 22
Lima, 22 de junio. Perú comenzó hoy la semana con ciudades bloqueadas y paralizadas, carreteras tomadas y movilizaciones campesinas en lo que acentúa la presión social contra el gobierno del presidente Alan García.
Unos 700 campesinos de la provincia Canchis, escenario de una huelga cívica desde hace 11 días, llegaron hoy a la ciudad de Cusco con la intención de boicotear la fiesta del Inti Raymi (del sol), que se celebra cada 24 de junio con la afluencia de turistas nacionales y extranjeros.
Durante la jornada de este lunes los campesinos intentaron tomar el aeropuerto de Cusco, pero fueron desalojados por la policía.
Según versiones de prensa, en la acción policial en la que se impidió que los campesinos tomaran la terminal aérea fue detenida al menos una persona con bombas molotov.
Horas más tarde, el gobierno regional de Cusco llegó a un acuerdo con los pobladores para que se realice con normalidad la fiesta del Inti Raymi. Agregó que se atendieron las demandas que estaban a su alcance –sin especificar cuáles– aunque quedaron asuntos que sólo los puede resolver el gobierno central por lo que continuará la huelga cívica pero sólo en Canchis.
Los campesinos de Canchis reclaman la derogación de la ley de recursos hidráulicos, otra norma que criminaliza las protestas y la anulación de los contratos agroenergéticos, que permiten la concesión de campos de cultivo para la explotación de petróleo y gas.
Por su parte, en la provincia andina sureña, Andahuaylas, en el departamento Apurímac, se completaba hoy el día número 12 de paralización y aislamiento, con el aeropuerto tomado, carreteras bloqueadas y grupos de campesinos vigilando el casco urbano para que nadie desobedezca la orden de huelga.
Tanto en Canchis como en Andahuaylas los movimientos comenzaron en solidaridad con los indígenas amazónicos, entonces en huelga contra unos dos decretos que según ellos amenazaban sus tierras y que fueron derogados por el Congreso, pero adquirieron agenda propia.
En este contexto, unos 3 mil trabajadores de la minera estadunidense Doe Run, en la ciudad de La Oroya, bloquearon la estratégica carretera entre Lima y el departamento Junín, al comenzar una huelga por reinvindicaciones laborales.
El presidente saliente del Consejo de Ministros, Yehude Simon, afirmó que las protestas son promovidas por ultrarradicales
que buscan nuevas razones para sembrar el caos ahora que se llegó a un acuerdo con los nativos amazónicos. Logramos apagar esta mecha (la Amazonia) y eso para los grupos que quieren golpear la democracia ha sido un nocaut
, dijo.