Recife, 12 de junio. Más restos del Airbus de Air France que cayó al mar con 228 personas a bordo el pasado primero de junio fueron avistados hoy en el Atlántico frente a la costa brasileña, informaron las autoridades de la marina y la aeronáutica de Brasil.

Según la información, dos embarcaciones que participan de las búsquedas fueron enviadas hacia el lugar donde desde dos aeronaves se pudieron ver trozos de un avión que posiblemente pertenezcan al Airbus accidentado.

Hasta el momento sólo han sido rescatadas una pequeña cantidad de restos de la aeronave y una pieza grande, el estabilizador vertical, que se localiza en la cola del avión, donde se ubica el timón de dirección, el cual sirve para evitar grandes sacudidas en caso de turbulencias.

En tanto, tres cadáveres rescatados el jueves fueron transportados en la fragata Constitución rumbo a la isla Fernando de Noronha, donde se les realiza un reconocimiento preliminar. Posteriormente, los cuerpos serán llevados al Instituto Médico Legal de la ciudad de Recife para su identificación.

En total, 44 cuerpos fueron rescatados hasta hoy desde el pasado primero de junio, cuando el avión, que volaba desde Río de Janeiro hacia París, cayó al océano por causas que aún se intenta determinar.

Por lo pronto, los cadáveres de 16 de los pasajeros del Airbus no presentan quemaduras, dato que descartaría la posibilidad de que el avión de Air France hubiese explotado, según el equipo forense brasileño encargado de hacer las autopsias.

Además, la mayoría de los cuerpos estaban desnudos debido a que la fuerza del viento les habría arrancado la ropa. Según la cadena Globonews TV y el periódico Estado de Sao Paulo, estas revelaciones refuerzan la hipótesis de que la nave se pudo desintegrar antes de caer al mar.

Sin embargo, las esperanzas de hallar más cuerpos se desvanecen. En este contexto, y vistas las dificultades de la zona de rescate, cada dos días a partir del 17 de junio, la fuerza aérea y marina brasileñas procederán a una reunión para evaluar la continuidad de las búsquedas, explicaron funcionarios de la nación sudamericana.

Los operativos de búsqueda, en los que participan navíos y aeronaves brasileños y franceses, con ayuda de equipos estadunidenses para captar señales a grandes profundidades, tienen como una prioridad encontrar las cajas negras con los registros de vuelo del avión.