Diversos colectivos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) advirtieron que defenderán los espacios y cubículos estudiantiles que han ocupado dentro de la institución, entre ellos el auditorio Che Guevara de la Facultad de Filosofía y Letras (FFL), por lo que no permitirán que las autoridades universitarias intenten recuperarlos.

Durante un mitin en la entrada de la FFL, poco más de 100 ocupantes informaron que ha comenzado la organización para la defensa de los espacios estudiantiles, pues no desocuparemos ninguno.

Responsabilizaron a las autoridades de la institución de cualquier posible agresión en su contra. En ese contexto, también demandaron que no se relacione al movimiento estudiantil con el narcomenudeo que existe en la institución y exigieron a los funcionarios de la UNAM un pronunciamiento al respecto.

Los activistas entregaron un documento a la directora de Filosofía y Letras, Gloria Villegas –también dirigido al rector José Narro–, en el que manifiestan su rechazo contra la criminalización del estudiantado, la protesta social y el pensamiento crítico.

Rechazamos el uso de argumentos que califican el trabajo de los grupos estudiantiles como ajenos a la academia, por estar vinculados con las problemáticas de nuestra sociedad, aseguran en la misiva firmada por la Brigada de Educación Popular, el Colectivo Carlos Marx, la Coordinadora Anticapitalista Che Guevara, el Comité Cereza, entre otros.

Censuraron que las autoridades de la UNAM se apeguen al discurso de brindar seguridad y protección a la comunidad para justificar la desaparición de los diversos espacios del trabajo estudiantil.

Entre gritos de fuera policía de la UNAM, algunos de los manifestantes arremetieron contra un vehículo de Auxilio UNAM que se había colocado sobre los pasillos de la FFL para impedir que se coloquen vendedores ambulantes. Los activistas lo empujaron hasta llevarlo al estacionamiento de la escuela y pegaron carteles sobre el parabrisas.

En el documento dirigido a las autoridades manifestaron su condena a las acciones violentas que derivaron en el asesinato del presunto narcomenudista Ricardo Eduardo Valderrama de la Rosa, la semana pasada en el estacionamiento de la FFL, lo cual representó un riesgo para la comunidad, pero rechazaron que las autoridades lo usen como pretexto para atacar a sus movimientos estudiantiles.

Agregaron que el discurso sobre la seguridad “alimenta las difamaciones de los falsos vínculos del trabajo estudiantil organizado con el narcotráfico y la guerrilla, y justifican el asesinato de nuestros compañeros ocurrido en Sucumbíos, Ecuador –en marzo del año pasado en un campamento de las FARC– y la deportación ilegal del investigador colombiano Miguel Ángel Beltrán (a quien el gobierno de Colombia acusa de ser parte del grupo insurgente)”.

Una veintena de colectivos de diversas instancias de la UNAM se dieron cita en la FFL para extender su apoyo a los grupos que ocupan desde hace casi 10 años el auditorio Che Guevara.

Luego de que un grupo de profesores e investigadores eméritos de la facultad solicitó a Narro la recuperación de ese recinto y de que las autoridades universitarias se pronunciaran en el mismo sentido, los colectivos que ocupan el auditorio se declararon en estado de alerta ante cualquier posibilidad de ser desalojados del espacio.

Antes esto es que nos reservamos el derecho a emprender las medidas políticas que consideramos necesarias, sin previo aviso, dentro y fuera del auditorio, para la defensa del mismo y de nuestros compañeros.